Uno de cada 5 valencianos afronta la guerra y el desabastecimiento en exclusión social tras el covid

Recortes en la explotación marina, establecimientos que se quedarán sin carne de vacuno a mediados de semana, retrasos en la entrega de los pedidos que ya superan los 7 días: mientras la situación en la España que gobierna el socialista Pedro Sánchez alcanza el grado crítico, en la Comunidad Valenciana, 1 de cada 5 personas se encuentra en situación exclusión. Y es en esa situación como afronta las consecuencias derivadas de la guerra de Ucrania y el creciente y alarmante desabastecimiento.

Los datos forman parte del Informe sobre Exclusión y Desarrollo Social en la Comunidad Valenciana de la Fundación de Estudios Sociales y Sociología Aplicada (Foessa) en torno a los resultados de la encuesta sobre Integración y Necesidades Sociales 2021. Con un trabajo de campo elaborado entre los meses de marzo y mayo del pasado año, que pretendía ofrecer una fotografía de la exclusión en España durante el «tsunami» de la pandemia. Y si ya de por sí dibujaba un paisaje preocupante, los acontecimientos de estos 3 primeros meses del nuevo año 2022, lo complica aun más.

De acuerdo con los datos de esa encuesta y destacando unas pinceladas sobre los mismos, el 21,3% de la población de la Comunidad Valenciana se encuentra en situación de exclusión, pero especialmente acentuada en lo referente a personas que se encuentran en situación de exclusión severa, que alcanza el 12,3%. Lo que implica, según el citado informe que algo más de 1 cada 5 personas, en torno a 1.076.000 valencianos vive en situación de exclusión. También, ha crecido el número de personas que se hallan en situación de exclusión severa: de 527.000 en 2018 hasta 621.000 en 2021. El grado de exclusión severa es superior al de Madrid (12,1%), pero inferior a Cataluña, donde alcanza el 15,5%. En cuanto a la variación porcentual de la incidencia de la exclusión social entre 2018 y 2021, en la Comunidad Valenciana ha crecido un 1,4%.

Los problemas más frecuentes, que afectan en torno al 14% de la población valenciana son: pobreza severa, inestabilidad laboral grave del sustentador principal, exceso de gastos de vivienda y dificultad para comprar medicamentos por problemas económicos. Este último afecta al 15,8% de la población y al 12,9% de los hogares. Se trata, en su conjunto, de situaciones carenciales que afectan a en torno a 750.000 personas en territorio valenciano.

Otro dato significativo es el de los colectivos más afectados por la exclusión social. Por tanto, los hogares pobres o sin ingresos, persona sustentadora principal en busca de empleo y familias numerosas. En concreto, 9 perfiles o colectivos registran en la Comunidad Valenciana tasas de exclusión que superan el 40%: se trata de los hogares sin ingresos y por tanto con una situación de exclusión generalizada (98%), los que se encuentran en pobreza severa (93,8%), aquellos en los que el sustentador principal está buscando empleo (82,8%), hogares de más de 5 personas (62,5%), aquellos cuya persona sustentadora principal está inactiva (48,9%), aquellos cuya persona sustentadora principal es de nacionalidad extranjera (48,7%), aquellos cuyo sustentador principal no tiene estudios o los tiene pero incompletos (44,9%) y hogares monoparentales (41%).

Son algunos de los datos de los informe, pero que permiten valorar ciertos parámetros acerca de la precariedad, en algunos casos extrema, con que llega una parte de la población valenciana, tras el enorme castigo a que ha sometido la pandemia, a la situación actual de crisis y desabastecimiento.