Comunidad Valenciana
FRAUDE A LA SEGURIDAD SOCIAL

Detenida una farmacéutica y 5 responsables de residencias investigados por clonar tarjetas de mayores

Se han intervenido 3.000 cajas de medicamentos facturados a la Seguridad Social y más de 500 tarjetas sanitarias clonadas

Llegaron a dispensar con las tarjetas clonadas medicamentos a ancianos que no los tenían pautados

Una carta sospechosa en el buzón: la última estafa de la que advierte la Guardia Civil

La Guardia Civil ha detenido a la farmacéutica de un pueblo de Alicante, de 39 años y nacionalidad española, por los presuntos delitos de fraude contra la Seguridad Social, contra la Salud Pública, Falsificación de Documento Público y Contra la Intimidad. Además, están siendo investigadas otras seis personas de edades comprendidas entre los 37 y los 87 años, cinco de ellas responsables de residencias de mayores y personas dependientes y una sexta una mujer también española supuestamente amiga de la boticaria detenida. En todos los casos, por su presunta relación con los hechos investigados. En la operación, se han intervenido 3.000 cajas de medicamentos facturados a la Seguridad Social, así como más de 500 tarjetas sanitarias clonadas y diversa documentación médica de pacientes de residencias. 

La investigación arrancó en octubre del pasado año 2022 a instancias del Área de Inspección de Farmacia de la Consejería de Sanidad valenciana. Al percatarse los inspectores de que una farmacia alicantina, la única, según ha podido saber OKDIARIO, de una localidad ubicada en el Condado de Cocentaina muy cerca de Alcoy, tenía un comercio inusual en la venta de medicamentos financiados por el Sistema Nacional de Salud.

Según la Guardia Civil, los inspectores detectaron supuestas irregularidades en una primera inspección de carácter administrativo, por lo que el Departamento de Farmacia y Ordenación Sanitaria de la Dirección Territorial de Sanidad en Alicante dio cuenta a la Guardia Civil y solicitó de esta el acompañamiento a otra inspección.

A esa inspección acudió el Equipo Territorial de la Policía Judicial de la Guardia Civil en la también alicantina localidad de Villena y fueron incautadas diversas tarjetas magnéticas clonadas que contenían información sanitaria de pacientes de la Generalitat Valenciana, así como cajas de medicación sin código de barras o cupón de precinto.

En el interior de esas instalaciones, se detectaron numerosas habitaciones, en cuyo interior se acumulaban los medicamentos supuestamente dispensados, medicación caducada y productos químicos de limpieza. Pero, también, una base de datos con información de internos de varias residencias de la provincia de Alicante.

Los agentes identificaron, también, a una mujer que durante la inspección abandonaba la farmacia con una caja, que contenía más de esas tarjetas magnéticas listas para ser clonadas, un archivador con informes médicos de pacientes y documentación manuscrita.

Se incautaron casi 3.000 cajas de medicación facturada a la Seguridad Social con un valor de 39.000 €, más de 500 tarjetas sanitarias clonadas y la ya citada documentación médica de pacientes de residencias. 

‘Modus operandi’

Según la Guardia Civil, las tarjetas se clonaban con el supuesto conocimiento de al menos cinco responsables de centros de personas mayores o dependientes de la provincia de Alicante.

Una vez clonadas, y siempre según la Guardia Civil, esas nuevas tarjetas eran utilizadas para efectuar las dispensas de medicamentos simuladas. Es decir, supuestamente, se realizaba la venta de los medicamentos a los titulares de las tarjetas, pero el medicamento no era dispensado, sino que era apartado sin cupón de precinto.

Finalmente, con el supuesto conocimiento de la persona titular de la farmacia, el gasto se cargaba al sistema nacional de salud y generaba el presunto lucro ilícito. Según la Guardia Civil, era tal el afán de facturar, que se dispensaban medicamentos a mayores que nos los tenían pautados al Sistema Nacional de Seguridad Social.

La detención de la boticaria se produjo en pasado 19 de enero. Hay otras seis personas investigadas: una amiga de la farmacéutica y cinco responsables de residencias. Todos sin antecedentes por hechos similares. La investigación está a cargo del Juzgado de Instrucción 4 de Alcoy.