Cómo viajar con tu bebé de la manera más cómoda posible
Viajar con un bebé no es fácil, y menos cuando tiene pocos meses de edad, debido al exigente nivel de atención que requiere en aspectos tales como la alimentación, el sueño o el cambio de pañal, entre otras cosas. Pero esto no debería ser un problema, puesto que viajar con un niño también se puede realizar haciendo uso de una serie de recursos que lo facilitan de manera notable.
Por eso, a continuación, desde BabyAffinity, os vamos a hablar de las ventajas de desplazarse con un pequeño y de las maneras más seguras de hacerlo, siempre intentando que la experiencia sea lo más cómoda posible para todas las partes:
Control
En primer lugar, no hay que olvidar que el bebé, al tener todavía pocos meses, es probable que no sienta ese viaje como un trastorno. Además, el hecho de que aún no camine, facilita que sus padres puedan tenerlo más controlado, ya que cuando empieza a andar es mucho más difícil hacerse con su hijo y evitar que lleve a cabo determinadas acciones.
Seguridad
Respecto a la seguridad del viaje, siempre hay que llevar preparado un botiquín de primeros auxilios. En este sentido, es importante no olvidar ningún medicamento que esté tomando el bebé o cualquier receta que se pueda llegar a necesitar.
De la misma manera, es buena idea llevar encima una hoja de emergencia que contenga números de teléfono de contacto por si pasara algo y los datos más importantes de salud del pequeño. Con esto nos estamos refiriendo, por ejemplo, a lo que son los nombres de medicamentos que esté ingiriendo por prescripción médica.
Asimismo, en el coche, el niño siempre debe viajar en su silla para el coche. Es imprescindible que el padre o la madre se cerciore por completo de que cumple los requisitos necesarios que garanticen su bienestar y que dejen claro que está bien sujeto.
Otros consejos
Si los anteriores son recomendaciones importantes para conseguir que cualquier traslado sea lo más confortable para el niño y también para sus padres, también son fundamentales estos otros consejos:
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Es necesario poner parasoles en las ventanas. Esta es una buena idea para hacer el viaje más cómodo a tu bebé, a la hora de que no puedan molestarle los rayos del sol.
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Si vas en transporte público con tu pequeño, también puedes llevarlo en su asiento específico para coches. Y es que, de manera indudable, lo mantendrás mucho más seguro, ya que no todos los medios de transporte tienen cinturones de seguridad adaptados.
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Por supuesto, no te olvides llevar encima el biberón de tu hijo y una botella de agua para que esté bien hidratado en todo momento. En este sentido, si ya se alimenta con otros productos que no sean leche materna, también es recomendable que tengas a mano desde un poco de fruta hasta unas galletas, para saciar su hambre.
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Fundamental es que recuerdes coger pañales de recambio y una muda limpia.
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Y no te olvides de sus juguetes, que te ayudarán a que vaya entretenido durante el viaje.