El Consell de Mallorca abre la puerta a la importación e incineración de basura de Ibiza
El único vertedero ibicenco se encuentra en una situación límite por el fin de su vida útil y falta de capacidad
La importación de residuos debe de hacerse a petición de los dos consells insulares y con el acuerdo del Govern


El Consell de Mallorca abre la puerta por primera vez a importar basura procedente de Ibiza, cuyo vertedero de Ca na Putxa está en una situación límite por el fin de su vida útil y falta de capacidad para gestionar más residuos.
En el pleno que está celebrando hoy la institución insular, el conseller de Presidencia, Antoni Fuster, ha precisado que la posibilidad de trasladar los residuos hasta la incineradora de Son Reus en Palma «es una cuestión de carácter autonómico». Por tanto, sería el Govern el que tendría que negociar con los dos consells insulares gobernados por el PP esta posibilidad que contempla la ley de residuos balear y el plan sectorial de residuos de Mallorca. «La importación de residuos debe de hacerse a petición de los consells y con el acuerdo del Govern», ha afirmado Fuster.
El de Ca na Putxa es el único vertedero oficial operativo existente en Ibiza y está en una situación límite, que está provocando ya un serio problema ambiental y político por las dudas de los diferentes partidos a la hora posicionarse sobre cuál debe ser la mejor solución.
El pasado verano la Plataforma Es Hora de Soluciones para el Vertedero de Ibiza exigió al Consell la clausura de estas instalaciones, sin esperar a que esté saturado por los problemas relacionados con los olores y las emisiones de gases que afectan a miles de personas, con fuentes de emisión ubicadas a menos de 200 metros de viviendas, y a 800 metros del núcleo urbano de Jesús.
El colectivo también expresó su rechazo a la posibilidad de que se instale una incineradora en la isla, algo que en estos momentos no contempla el Consell de Ibiza por lo que el colectivo vecinal afectado apuesta por el traslado de los residuos a Mallorca, posibilidad que hoy ha abierto el conseller de Presidencia, Antoni Fuster.
En las próximas semanas, se espera que Govern y los dos Consells insulares inicien conversaciones determinantes para buscar una solución definitiva que permita poner punto y final, a corto plazo, al problema ambiental que está provocando en Ibiza la situación de colapso que padece el vertedero de Ca na Putxa.
El año pasado Govern y Consell de Mallorca consultaron a la empresa Tirme que gestiona el vertedero de Son Reus si esta infraestructura de Palma tendría capacidad suficiente para incinerar la basura importada desde Ibiza, que sería antes tratada y llegaría embalada a Palma, garantizando el concesionario esta posibilidad.
La importación de residuos a Mallorca no sería una novedad. Durante los años 2014 y 2015 unas 24.000 toneladas procedentes de Italia en ocho transportes fueron incineradas en Son Reus. También se incineró basura procedente de Cataluña e Irlanda. La importación de basura permitió a Tirme congelar la tasa de incineración a los ciudadanos de Mallorca.
También en 2015 el entonces presidente del Consell de Mallorca, Miquel Ensenyat (Més) propuso que Son Reus asumiera la incineración de toda la basura de Baleares para amortizar unas instalaciones «sobredimensionadas» e intentar no subir tasa de tratamiento de residuos.