El hábito tabáquico produce problemas lumbares y cervicales: agrava el daño estructural en las vértebras

Las molestias en la parte superior del cuerpo pueden tener orígenes muy diversos y son cada día más prevalentes

Fumar incrementa el riesgo de cáncer de pulmón de 5 a 10 veces, con mayor riesgo entre los fumadores empedernidos

fumar cervicales
Fumar puede tener problemas serios en las cervicales.
Diego Buenosvinos
  • Diego Buenosvinos
  • Especialista en periodismo de Salud en OKDIARIO; responsable de Comunicación y Prensa en el Colegio de Enfermería de León. Antes, redactor jefe en la Crónica el Mundo de León y colaborador en Onda Cero. Distinguido con la medalla de oro de la Diputación de León por la información y dedicación a la provincia y autor de libros como 'El arte de cuidar'.

Fact checked

×

Este artículo de OkSalud ha sido verificado para garantizar la mayor precisión y veracidad posible: se incluyen, en su mayoría, estudios médicos, enlaces a medios acreditados en la temática y se menciona a instituciones académicas de investigación. Todo el contenido de OkSalud está revisado pero, si consideras que es dudoso, inexacto u obsoleto, puedes contactarnos para poder realizar las posibles modificaciones pertinentes.

Fumar incrementa el riesgo de cáncer de pulmón de 5 a 10 veces, con mayor riesgo entre los fumadores empedernidos. También está vinculado con el cáncer de boca, faringe, laringe, esófago, estómago, páncreas, cérvix, riñón y vejiga, así como con las leucemias mieloides agudas. Con esta visión tan demoledora de su daño en la salud, hay que añadir ahora que el hábito tabáquico puede producir problemas lumbares y cervicales, ya que «afecta el flujo sanguíneo».

Esto sucede porque, según los investigadores, agrava el daño estructural en las vértebras; contribuye a la degeneración de los huesos» y «afecta las raíces nerviosas, incrementando el riesgo de dolor radicular y ciática», según explica la jefa de la Unidad del Dolor del Hospital Universitario Sanitas Virgen del Mar, Eva Mercado.

Las molestias en la parte superior del cuerpo pueden tener orígenes muy diversos y son cada día más prevalentes. De hecho, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más de 500 millones de personas en todo el mundo sufren dolor lumbar y unos 200 millones dolor de cuello.

En este sentido, existen varios factores que pueden provocar o agravar estos dolores, como el estrés, que aumenta la tensión muscular en cuello y hombros y está muy relacionado con el dolor cervical crónico, o el sedentarismo, que predispone al dolor cervical y lumbar.

«Por eso hay que realizar actividad física. Es muy necesario mantenerse activo. También previene el sobrepeso, que dificulta mantener una postura estable y, por tanto, puede conllevar la aparición de este tipo de dolor», añade la doctora Mercado.

«Otro consejo que daría es cuidar el calzado: un tacón no debe superar los tres centímetros y ha de ser lo suficientemente ancho para que el pie pueda tener el punto de apoyo necesario para no provocar desequilibrios», detalla la experta.

Bruxismo

Asimismo, problemas como el bruxismo, la mala oclusión dental o la tensión en la mandíbula pueden desencadenar una serie de compensaciones musculares y posturales que afectan directamente a ambas zonas.

En este sentido, la odontóloga del Departamento de Innovación y Calidad Clínica de Sanitas Dental, Lorena Trinidad Bueno, asegura que «es trascendental mantener una postura adecuada al masticar y hablar. Estos hábitos, junto con cuidados dentales regulares que garanticen una salud oral óptima, promueven una columna vertebral más alineada y libre de molestias».

Así, fumar también aumenta notablemente el riesgo de enfermedades cardíacas, incluidos los ataques cerebrales o cardíacos, las enfermedades vasculares y el aneurisma. Las enfermedades cardiovasculares representan el 40% de todas las muertes relacionadas con este hábito y causa enfermedad cardíaca coronaria.

Evitar lesiones

A su vez, desde Sanitas precisan que otro aspecto que se suele olvidar, tan importante como el resto, es la higiene postural, que consiste en adoptar posiciones y movimientos que distribuyan correctamente el peso que debe soportar la columna vertebral para evitar lesiones.

«Si no se adoptan posturas óptimas en la rutina diaria, el daño puede derivar en lesiones como lumbalgias, cervicalgias, contracturas, túnel carpiano o epicondilitis, entre otras», apunta la doctora Mercado.

Para evitar estos problemas y fomentar una correcta higiene postural, desde Sanitas recomiendan que, en caso de dedicar muchas horas sentado delante del ordenador, se debe procurar que el ángulo de visión esté en línea recta con la pantalla y, así, evitar una inclinación innecesaria para el cuello.

Además, el tronco del cuerpo debe acercarse lo máximo posible al respaldo del asiento para evitar encorvarse. Con la espalda recta, el cuerpo adoptará un ángulo de 90 grados entre tronco y piernas.

También se deben apoyar los antebrazos, mantener los hombros relajados, no doblar las muñecas y que los pies alcancen a apoyarse totalmente en el suelo, evitando que se queden colgando.

Lo último en OkSalud

Últimas noticias