Alimentación saludable

Cómo cuidar tu dieta en invierno

Cuidar la dieta en invierno puede ser todo un reto. Y es que, en ocasiones, debido a las bajas temperaturas del exterior, se tiende a consumir demasiados alimentos ricos en calorías.

Cuidar tu dieta en invierno
El invierno es la mejor época del año para consumir sopas y caldos.

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No obstante, existen alimentos muy saludables y aptos para esta época del año, los cuales merece la pena conocer.

Sopas y caldos: el invierno es la mejor época del año para consumir sopas y caldos. Para cuidar la dieta y favorecer el buen funcionamiento del organismo lo mejor es optar por recetas caseras, elaboradas con verduras y hortalizas. Tanto la cebolla como el ajo son dos ingredientes especialmente recomendados, ya que tienen propiedades antisépticas y protegen de enfermedades respiratorias.

Yogur: el yogur es uno de los mejores alimentos para consumir en invierno y mantener a raya el peso corporal. Los yogures bajos en grasa mejoran el tránsito intestinal y tiene un aporte calórico muy bajo. Se pueden tomar acompañados de fruta fresca o cereales integrales. Una idea fantástica de snack para tomar entre horas.

Miel: lo mejor es evitar el azúcar y utilizar la miel pura de abeja para endulzar los alimentos. Este es un ingrediente natural que aporta más energía, tanto a nivel físico como mental, al tiempo que favorece la salud de las vías respiratorias. Así, el organismo está mejor preparado para combatir trastornos propios del invierno, como la gripe o el resfriado.

Lácteos y huevos: durante esta época del año es importante protegerse del frío y cuidar la piel para que no se reseque y se deshidrate. Para ello, es importante consumir alimentos ricos en vitamina A como los lácteos y los huevos.

Cítricos: otros de los alimentos que no pueden faltar en una buena dieta durante el invierno son los cítricos. La razón es que son una fuente muy rica de vitamina C, un nutriente que estimula el sistema inmune y protege de determinadas enfermedades como la gripe y el resfriado.

Agua: por supuesto, una buena hidratación es fundamental para que el organismo funcione de manera adecuada. En el caso de los adultos, se recomienda tomar dos litros de agua diarios, repartidos a lo largo del día. Es la mejor forma de cuidar la piel, los tejidos y los órganos.

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