Citan a declarar a una empleada de una residencia de Gerona por varias muertes por covid

Un juzgado ha citado a declarar mañana como investigada a la trabajadora del geriátrico Torreblanca de Sant Joan les Fonts (Gerona), que al parecer fue a trabajar con síntomas de covid y fue despedida, y a la responsable del centro como testigo, por la denuncia de familiares de una de las personas que fallecieron durante la pandemia de covid.

El juzgado de Primera Instancia e Instrucción 1 de Olot (Gerona) ha citado también a declarar a otra trabajadora del centro y a familiares de una de las siete personas que fallecieron durante la pandemia, que presentaron denuncia el 25 de agosto de 2021.

Los hechos se remontan a agosto de 2021, cuando un brote de covid, supuestamente provocado por la empleada investigada de la residencia –gestionada por la cooperativa Suara-, contagió a 15 de los 53 internos del centro y acabó con la muerte de siete de ellos.

Según fuentes del despacho Vosseler Abogados, que lleva la acusación particular de la familia denunciante, las citaciones son a partir de las diez de la mañana.

Tal y como consta en las diligencias previas, la empleada del centro investigada fue a trabajar al geriátrico Torreblanca, pese a reconocer a algunos compañeros que tenía síntomas compatibles con covid.

El letrado Álvaro Machado, que representa a la familia de Luciana Moreno Maillo, que murió a causa del Covid, estos hechos son «muy graves» y los califica de «homicidio múltiple por imprudencia grave», ya que «en las mismas fechas murieron siete residentes del centro por el mismo brote de covid, supuestamente provocado por la empleada».

Machado ha lamentado que «la falta de medios y personal de la Justicia» haya provocado que todo el proceso arrastre un «injustificable retraso de casi tres años».

A modo de ejemplo, ha explicado que la declaración de testigos e investigada que estaban fijada para el pasado mes de junio, y se aplazó hasta este 30 de enero de 2025.

A principios de agosto de 2021 se detectó un brote de Covid en el geriátrico Torreblanca, que provocó la muerte de siete residentes, entre ellos, Luciana Moreno Maillo, que falleció el 21 de agosto del 2021.

Los familiares de esta víctima en seguida supieron que el presunto origen de este brote pudo estar en una trabajadora del centro, quien, al parecer, fue a trabajar «para no perjudicar al servicio» y no fue hasta, el 4 de agosto, cuando, confirmado el diagnóstico de covid, cogió la baja por enfermedad.

Según la acusación, el hecho de que la trabajadora diera positivo en el test llevó a los responsables del geriátrico a despedirla, mediante burofax del 25 de agosto, por negligencia en su actuación.

La dirección del centro también reconoció que la mayoría de los positivos de covid que se dieron en estas fechas en el centro (15 residentes y 7 empleados) fueron en la planta donde estaba asignada la trabajadora despedida.