Opinión

¿Piensa Fernández Vara que la Transición fue un «pacto de silencio»?

Fruto del acuerdo entre el PSOE y Podemos, los alumnos extremeños de la ESO y Bachillerato ya están siendo aleccionados sobre lo mala que fue la Transición democrática que hizo imposible «la recuperación de la memoria histórica y la dignidad de las personas». O sea, que en lugar de poner en valor el espíritu de consenso constitucional que hizo posible que la democracia se afianzara en España, a los chavales de Extremadura se les habla de un sedicente «pacto de silencio» durante la Transición para exonerar al franquismo.

La idea, que obviamente partió de Podemos y fue secundada por el Gobierno del socialista Guillermo Fernández Vara, se ha plasmado en una «Ley de memoria histórica y democrática en Extremadura» que obliga a los colegios a impartir clases de «Verdad histórica» a los alumnos para que conozcan «en toda su amplitud los orígenes, naturaleza y manifestaciones de la represión política, ideológica, educativa y cultural que sufrieron las extremeñas y los extremeños» durante la Guerra Civil y el franquismo.

La ‘verdad’ que se va enseñar en los colegios extremeños responde al patrón ideológico de la izquierda más sectaria y radical. Muy al gusto de Podemos, el PSOE se ha sumado al carro para impugnar con efectos retroactivos la más valiosa etapa de unidad nacional y consenso que sirvió de impulso para lograr afianzar nuestro marco constitucional. Se trata, pues, de demoler el espíritu de la Transición en las aulas extremeñas, una barbaridad a la que ha contribuido decisivamente el socialismo de Guillermo Fernández Vara, quien supuestamente era paradigma de equilibrio y moderación

Es posible que el presidente socialista de la Junta de Extremadura no se haya enterado de la letra pequeña de la ley y no haya tenido tiempo para reflexionar sobre las consecuencias que para los chavales de su región tiene venderles la idea de que  la Transición fue un claudicante «pacto de silencio». ¿Piensa Fernández Vara que realmente lo fue». ¿Se ha dejado convencer por Podemos?