Nuevo lema de la DGT: si eres hombre, conduce como una mujer

Ahora es la Dirección General de Tráfico (DGT) la que se ha subido a lomos del ultrafeminismo más dogmático y se plantea imponer clases sobre género obligatorias para conseguir y renovar el permiso de conducir. El organismo dependiente del Ministerio de Interior pretende «poner en valor comportamientos vinculados con la prudencia, la no violencia, la tranquilidad o la paciencia y que cuestionen la representación social de la masculinidad como sinónimo de riesgo, agresividad o velocidad». O sea, que si usted quiere sacarse el carné o renovarlo sepa que el Gobierno pretende someterle a «un curso obligatorio con un módulo de valores de igualdad y la deslegitimación de la violencia contra las mujeres en la conducción de vehículos».

Por si usted quiere anticiparse al temario, sepa que le van a preguntar sobre «género, roles y estereotipos», «identidad de género», «masculinidades: patriarcado y heteronormatividad», «femicidios, travesticidios y crímenes de odio», «herramientas y formas de abordaje contra la violencia en la conducción de vehículos» o, entre otros, «acceso y participación de mujeres y diversidades en el sector transporte». Para más inri, si usted es un profesional de las autoescuelas o centros de enseñanza de conducción, tendrá que participar en talleres de sensibilización en materia de género. Y tendrá, por tanto, que superar estas sesiones para evitar el machismo en su día a día. Se requerirá «un mínimo de horas de formación en igualdad como una formación transversal más para poder ser profesor o profesora de autoescuela».

Todo se sustancia en que hay que emular el comportamiento al volante de las mujeres (paciencia, respeto a las señales, sin excesos, seguridad, autocontrol, cuidado) para «romper con el estereotipo de que ‘conducen peor’ y centrar el mensaje en que su forma de desplazarse en las carreteras es más positiva y es un modelo más interesante a imitar». En conclusión, que los hombres son un peligro al volante y tienen que conducir como las mujeres.