Lo que es un gasto militar superfluo son los 85 vuelos en Falcon de Yolanda Díaz

Yolanda Díaz se opone al aumento del gasto en Defensa, no tanto porque le parezca una herejía, sino porque en Sumar los antimilitaristas suman mayoría absoluta y no hay manera de convencerles. Lo que sí es una hipocresía es que mientras exhibe el rancio antimilitarismo de la izquierda más dogmática, la vicepresidenta ha realizado al menos 85 vuelos en el Falcon, una nave cuya flota forma parte de las Fuerzas Armadas. Es decir, que es muy progresista negarse a invertir en defensa, pero es muy chulo eso de disponer de una aeronave del Ejército para viajar cómodamente.
Según el Portal de Transparencia, hasta el 31 de diciembre de 2023 la titular de Trabajo había hecho uso del Falcon en 55 ocasiones. Desde entonces, ha cubierto 15 rutas con el mismo transporte, cuya ida y vuelta implican un total de 30 viajes. Es decir, que la vicepresidenta del Gobierno ha tomado el avión perteneciente a las Fuerzas Armadas, en 85 ocasiones. Eso sí, entre vuelo y vuelo, Yolanda Díaz ha mantenido imperturbable el dogma de que antes de gastar en defensa hay que priorizar la «lucha contra el cambio climático» y «la cohesión social»: «No habrá seguridad europea si no afrontamos la lucha contra la precariedad y la pobreza endémica que existe en el continente». Todo muy estupendo, muy progre, como si construir un buque de guerra no llevara aparejada la creación de empleo y garantizara el futuro laboral de miles de familias. ¿Preguntamos en Galicia, País Vasco o Andalucía?
Queda muy de izquierdas eso de que aumentar el gasto en defensa «no garantiza una mayor autonomía estratégica, ni mayores cuotas de seguridad compartidas», pero la frase de Yolanda Díaz revela una abrumadora falta de hondura. Se puede luchar contra la pobreza e invertir en empleo y al tiempo incrementar el gasto militar, porque no son conceptos antitéticos, sino que están estrechamente vinculados. Desde luego lo que no genera cohesión social ni ayuda a combatir el cambio climático es viajar en Falcon. Eso sí que es un gasto superfluo