¿Cómo vamos a fiarnos del Gobierno si los ministros no se fían entre sí?

La vicepresidenta primera del Gobierno, Nadia Calviño, tenía previsto acudir al Foro de Davos, el más importante del mundo, pero se ha borrado a última hora para evitar que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, presida el Consejo de Ministros. Hasta ahora el ministro de Economía siempre ha acompañado al presidente del Gobierno a uno de los foros en los que se capta mayor inversión para España, pero en esta ocasión no será así para evitar que la número 3 del Ejecutivo presida la reunión ministerial. Hay que recordar que la vicepresidenta segunda nunca ha presidido una reunión del Consejo y que con Carmen Calvo y Pablo Iglesias de vicepresidentes al ex líder de Podemos ni tan siquiera se le permitió asumir la presidencia en funciones.
La reflexión que cabe hacer ante esta situación insólita es de cajón: ¿Cómo vamos a fiarnos de este Gobierno si los ministros no se fían entre sí? Y es que mientras el país demanda soluciones urgentes para hacer frente a la crisis derivada del brutal incremento de precios, el Gobierno se parece cada vez más al ejército de Pancho Villa o al camarote de los hermanos Marx. Lo lógico y conveniente sería que Calviño acudiera a Davos en busca de inversores, como hacen todos los asistentes al foro, pero el clima de desconfianza entre los ministros del PSOE y de Podemos ha alcanzado cotas surrealistas. Hasta ahora, el poder ha logrado aplacar las desavenencias entre unos y otros, pero a medida que avanza la legislatura socialistas y podemitas elevarán el tono de sus disputas para marcar territorio con la mirada puesta en las próximas elecciones generales. Esto no es un Gobierno, sino una fábrica de intereses partidistas. Que la vicepresidenta primera y ministra de Economía no acuda al Foro de Davos revela hasta qué punto a los miembros del Gobierno no les mueve el interés de España, sino su propio interés