Razas de perros: el Eurasier

El Eurasier es un perro al que solo se le ponen adjetivos positivos. Cariñoso, leal, vigoroso y protector son algunos de ellos; es también una mascota fiel, tranquila y amable. A pesar de lo anterior, es una raza de carácter fuerte, que observa con reservas y sin demasiada efusividad a las personas que no forman parte de su círculo familiar. Aunque más allá de cierta ‘frialdad’, rara vez se muestra agresivo. Para educar estos canes es necesario un perfecto equilibrio entre firmeza y suavidad. Así mismo, requieren que sus dueños los guíen durante el proceso de socialización para mantener un comportamiento equilibrado durante toda su vida.

De cachorros son sumamente juguetones, tanto que son excelentes compañeros para niños pequeños. A medida que van creciendo se hacen más ‘serios’, aunque nunca pierden las ganas de correr y saltar. Otro punto a favor es que salvo ejemplares que no reciben las mejores atenciones de parte de sus propietarios, no sienten especial fascinación por destruir los objetos del hogar.

Una historia de película

El Eurasier es relativamente joven, creado apenas a principios de la década de 1960. De ‘pasaporte’ alemán, es una de las pocas razas a las que se les puede seguir su evolución paso a paso, hasta llegar al punto de origen. Pero no solo eso, su nacimiento es responsabilidad de una sola persona: Julies Wipfler.

Este personaje, amante de la literatura de aventuras centradas en expediciones polares, siempre quiso ser el dueño de un perro de trineo. Con esto en mente, se dio a la tarea de cruzar dos razas genéticamente compatibles: Chow chow y Wolfsspitz. El experimento rindió frutos de forma relativamente rápida. A las primeras camadas se les conoció como Wolf – Chow.

Los resultados obtenidos por Wipfler despertaron el interés de especialistas caninos y criadores. Esto le permitió realizar consultas para dar con una fórmula que permitiera estabilizar la nueva raza. Es en ese momento cuando se agrega al cóctel el ADN de otra estirpe de cánidos: el Samoyedo.

El Eurasier: la mezcla de dos continentes

El padre del nuevo linaje confesó posteriormente que estuvo a punto de abandonar el proyecto. Pero su esfuerzo terminó siendo reconocido en 1973, casi tres lustros después de haber iniciado su obra, cuando el Wolf-Chow fue admitido como raza por la FCI. Aunque rechazaron este nombre, por lo que se optó por Eurasier (o Eurasian). Se trata de un juego de palabras entre los continentes a los que pertenecen los perros que sirvieron de base a la nueva raza.

El Eurasier es un perro tipo Spitz, catalogado como grande. Los machos miden entre 52 y 60 cm de alto, pesando entre 23 y 32 kg. Las hembras por su parte, tienen una estatura que varía entre los 48 y los 56 cm, mientras que sobre la báscula los indicadores muestran un rango que pasa de los 18 a los 26 kg. En resumen, grandes y pesados, pero muy cariñosos. Unos excelentes animales de compañía.