Lotería de Navidad
Ilusiones engañosas

Duro aviso de los psicólogos: «Si te toca la Lotería de Navidad, tienes más probabilidades de arruinarte la vida»

La Lotería de Navidad es mucho más que un sorteo; se trata de una tradición profundamente arraigada en la sociedad española. Cada diciembre, millones de personas sueñan con ganar «El Gordo», un premio que promete transformar vidas.

Sin embargo, detrás de esta ilusoria promesa, se oculta una realidad poco conocida: el impacto psicológico y financiero que puede acarrear convertirse en millonario de la noche a la mañana.

Los riesgos psicológicos de ganar la Lotería de Navidad 2024

Ganar un premio millonario supone un cambio drástico y repentino que no todas las personas están preparadas para afrontar. Psicólogos y expertos financieros coinciden en que, sin una planificación adecuada, el sueño puede convertirse en una pesadilla.

A continuación, exploramos cómo el impacto emocional y la falta de educación financiera influyen en el destino de muchos ganadores.

Exceso de dopamina y decisiones impulsivas

Cuando una persona se entera de que ha ganado un premio importante en la Lotería de Navidad, su cerebro libera una gran cantidad de dopamina, conocida como la «hormona de la felicidad».

Según la Dra. Sandra Farrera, este exceso de dopamina puede alterar la capacidad de tomar decisiones racionales, llevando a comportamientos impulsivos y gastos desmedidos.

«Las personas suelen entrar en una especie de estado de shock, creyendo que son más ricas de lo que realmente son», explica Farrera.

Este fenómeno, conocido en Estados Unidos como el Síndrome de Riqueza Repentina, puede provocar que los ganadores gasten el dinero en bienes que no necesitan, olvidando aspectos importantes como deudas pendientes o inversiones sostenibles.

Estrés y aislamiento social

La llegada de una fortuna también puede generar un alto nivel de estrés. Algunos ganadores enfrentan conflictos familiares y amistades que se deterioran debido a expectativas financieras no satisfechas.

Además, muchos prefieren no compartir la noticia por miedo a ser juzgados o manipulados, lo que puede derivar en un aislamiento social progresivo.

¿Por qué es importante una buena gestión financiera en el caso de ganar la lotería?

En España, solo un 49% de los adultos posee conocimientos financieros, según un estudio del Banco Mundial. Esto coloca al país por debajo de la media europea (52%) y muy lejos de países como Dinamarca y Suecia, donde el 71% de la población tiene una base financiera sólida.

Esta carencia influye directamente en la forma en que los ganadores gestionan su dinero.

Sin un plan adecuado, es común que el premio se diluya rápidamente, tal como explica el Dr. Stephen Goldbart, creador del concepto del Síndrome de Riqueza Repentina. «Lo que llega rápido, se va rápido», asegura.

Claves para evitar caer en la ruina tras ganar la Lotería de Navidad

Los psicólogos y expertos financieros recomiendan seguir estas pautas básicas si se gana un premio en la Lotería de Navidad:

Casos de ganadores que lo perdieron todo

La historia está llena de ejemplos de personas que, tras ganar un premio importante, terminaron en situaciones de ruina financiera o emocional. Uno de los casos más conocidos es el de Margaret Loughrey, una ganadora de 27 millones de libras en 2013.

A pesar de su fortuna, Loughrey declaró que «el dinero ha destruido mi vida». Regaló gran parte de su premio, enfrentó problemas legales y finalmente falleció en circunstancias trágicas.

Otro caso español destacado es el de José Manuel Calvo, quien ganó la Primitiva en 2003 y se suicidó seis años después. La pérdida rápida de su fortuna, junto con conflictos personales, fueron factores determinantes en su trágico desenlace.

La ilusión como motor de la lotería

Pese a estos riesgos, la Lotería de Navidad sigue siendo un evento que moviliza a millones de personas cada año. La ilusoria posibilidad de ganar «El Gordo», aunque extremadamente baja (0,00001%), es suficiente para que la mayoría continúe participando.

La psicóloga social Sandra Farrera explica que «la ilusión forma parte de nuestra naturaleza humana y nos impulsa a jugar, aun sabiendo que las probabilidades no están a nuestro favor».

Sin embargo, recuerda que es fundamental jugar de manera responsable y no depositar toda la esperanza en un boleto.