Podemos espía a Delgado: fotografió su cita con Florentino y Ferreras y ahora la de Inda y Cerdán
El partido de Pablo Iglesias, Podemos, ha emprendido una campaña de acoso y derribo contra la fiscal general del Estado, Dolores Delgado, por medio de un intenso operativo de espionaje. Primero, fotografió su cita privada con el presidente del Real Madrid, Florentino Pérez, y con el periodista Antonio García Ferreras, director de La Sexta y de Al Rojo Vivo. Después, los emisarios de la formación morada, colaboradores del diario Público, siguieron los pasos de la fiscal general y del director de OKDIARIO, Eduardo Inda, y del adjunto al director, Manuel Cerdán.
Los periodistas de OKDIARIO se reunían el pasado 3 de marzo, a la hora de la comida, con la fiscal general para realizar una entrevista periodística que habían concertado desde hacía tiempo. Mientras se desarrollaba esa actuación profesional, similar a la de cualquier profesional de otro medio de comunicación, los espías del partido morado seguían desde cerca los movimientos de los periodistas y de la responsable del Ministerio Público.
El autor de las imágenes, un ex reportero del programa de televisión Aquí hay Tomate, fue avisado con tiempo para que se apostara en las proximidades del lugar de la entrevista. Fuentes policiales aseguraron a OKDIARIO que Podemos dispone de un dispositivo importante de investigadores y de ex miembros de la Seguridad del Estado que realizan tareas de seguridad para el partido morado, pero también de seguimiento sobre sus enemigos potenciales.
Las mismas fuentes declararon que, por cómo se desarrollaron los hechos, tanto la fiscal general como los periodistas podrían “llevar rabo”, como se denomina en el argot policial las operaciones de seguimiento y espionaje.
Espionaje a periodistas, jueces y fiscales
Tampoco descartan que los seguimientos fueran monitorizados por alguna sección de los servicios secretos del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), ya que no sería la primera vez que han realizado seguimientos y espionaje a periodistas, jueces, fiscales y políticos. Basta recordar la filtración de la grabación de la conversación entre el ex ministro del Interior Jorge Fernández Díaz y el jefe Antifraude de Cataluña, que fue divulgada por el diario Público, propiedad del multimillonario Jaume Roures.
El lugar para la cita fue elegido por Dolores Delgado quien, tras la experiencia vivida con su encuentro con Ferreras y Florentino Pérez, prefirió un escenario más discreto, ya que la entrevista iba acompañada de una comida. Los periodistas de OKDIARIO sólo recibieron indicaciones sobre el lugar del encuentro, sin conocer más datos de las características del inmueble.
El operativo contra el presidente del Real Madrid y el director de La Sexta se consumó el pasado 29 de enero. Ambos comían de manera distendida con la fiscal general y con su actual pareja, el ex juez Baltasar Garzón, en el restaurante El Telégrafo de Madrid, un establecimiento especializado en pescados y mariscos. El encuentro se producía en una mesa situada en un lugar discreto, pero no en uno de los reservados del establecimiento.
Llama la atención, según visualiza un experto en inteligencia, que exista una coincidencia en los dos medios que se volcaron en la filtración de ambas grabaciones: Público y Vozpópuli. Los diarios del magnate de la televisión Jaume Roures y de Jesús Cacho, respectivamente, fueron escogidos para dar aldabonazo mediático. Ambos se retroalimentaron con ambas informaciones. En el caso de la comida con Florentino Pérez el medio utilizado fue Vozpópuli y en la entrevista con OKDIARIO, el podemita Público. Los dos muy bien relacionados con fuentes de los servicios secretos del CNI.
La cacería
En ambos casos de espionaje, los autores de las grabaciones buscaban unos resultados mediáticos que favorecieran a la formación morada, que desde hace meses ha emprendido una cacería contra la fiscal general.
A raíz de la divulgación de una grabación del comisario Villarejo a un grupo de policías y miembros de la Justicia, durante una comida en la que se celebrara la concesión de una medalla al comisario, Podemos colocó a Dolores Delgado en el punto de mira. Entonces, el partido de Iglesias estaba situado en la oposición y pidió la reprobación de la entonces ministra de Justicia.
Pablo Iglesias llegaba a pronunciar, en septiembre de 2018, en el hemiciclo un discurso estridente y soez, calificado de machista. Para desacreditar a la entonces ministra de Justicia, Dolores Delgado, que aparecía en una grabación con Villarejo, Pablo Iglesias llegaba a manifestar en septiembre de 2018: “Quien se reúne de manera afable con un personaje de la basura, de las cloacas de Interior en nuestro país, debe alejarse de la vida política porque hace daño a la mayoría parlamentaria que protagonizó la moción de censura y porque no es aceptable que en este país haya ministros que sean amigos de tipejos como Villarejo”.
Sorprendente, porque se daba la circunstancia de que, meses antes, uno de los fundadores de Podemos, Juan Carlos Monedero, y otros altos cargos de Izquierda Unida y Podemos habían mantenido encuentros con el “comisario de las cloacas”, según ha acuñado la formación podemita.
La cena secreta en casa de Roures
Un político exiliado venezolano en Madrid manifestó a OKDIARIO que la formación de Iglesias despliega los mismos métodos que el Gobierno del dictador Maduro: “Practican una presión bestial, con seguimientos, prácticas parapoliciales y ataques en las redes sociales para criminalizar y estigmatizar a las personas que, por cualquier motivo, consideran enemigas para sus intereses”.
La realidad es que el horizonte penal de Iglesias y Podemos viene acompañado de borrasca. La formación morada tiene abiertos varios frentes judiciales y presiona para apartar del cargo a la fiscal general. Varias son sus causas pendientes: caso Dina, Calvente, niñera de Montero, Echenique, Rossell, Alberto Rodríguez (el diputado de las rastas), Monedero, Neurona y las irregularidades en las obras de la sede del partido, entre otros.
El medio que publicó la supuesta exclusiva de la reunión de Eduardo Inda y Manuel Cerdán para entrevistar a la fiscal general Dolores Delgado fue Cntx, que opera mediante una alianza con el diario Público de Jaume Roures. El multimillonario Roures fue precisamente el anfitrión de la reunión secreta celebrada en agosto de 2017 entre Pablo Iglesias y Oriol Junqueras en Barcelona, para negociar el apoyo de Podemos al proyecto de ruptura de la Constitución de los independentistas. Iglesias se ha mostrado desde entonces fiel a su alianza con los golpistas.