Declarado un incendio en un centro de investigación nuclear de Karaj (Irán)
Las instalaciones de investigación de Karaj sufrieron varios sabotajes en 2021
En las últimas horas se ha declarado un incendio en un centro de investigación nuclear de Karaj, en Irán. En un principio, se ha informado de que se trataba de una central nuclear, pero varios expertos han asegurado que en la citada zona no hay instalaciones de este tipo, sino un centros de investigación.
«No hay ninguna central nuclear en Karaj, pero sí hay instalaciones de investigación de la Organización de Energía Atómica de Irán, donde ha habido sabotajes en el pasado», ha explicado Jason Brodsky, miembro de Unidos Contra el Irán Nuclear (UANI), que lucha contra el régimen de los ayatolás.
Por el momento, no se ha filtrado más información al respecto ni se tiene constancia de posibles víctimas. Tampoco ha habido una confirmación oficial por parte de Irán.
#BREAKING: Initial reports from an Iranian opposition group claim a fire has broken out at the nuclear power plant in Karaj. Regime-affiliated Iranian media is reportedly silent as images of the fire emerge. https://t.co/9JH0mP7d0x
— Israel War Room (@IsraelWarRoom) October 24, 2024
La instalación de Karaj ya ha sido objeto de ataques en el pasado. Por ejemplo, en el 2022 Irán trasladó parte de la maquinaria del citado centro de investigación tras sufrir un ataque que atribuyó a Israel.
Este suceso se ha producido en plena escalada de tensión en Oriente Medio. Precisamente, este miércoles, 23 de octubre, el ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, advirtió de que pronto responderán de manera contundente a los ataques de Irán. Cabe recordar que el pasado 1 de octubre los iranís lanzaron 180 misiles balísticos contra el territorio israelí.
La mayoría de los proyectiles fueron interceptados, si bien se produjeron algunos impactos en las inmediaciones de instalaciones militares en el centro y sur del país. Además, este ataque causó un muerto al caer sobre un palestino en Cisjordania los restos de un misil interceptado.
Esto se produjo sólo tres días después de que Israel matara a Hasán Nasrala, el líder de Hezbolá. Bajo el mando directo del régimen de los ayatolás de Irán -creadores y financiadores de este grupo terrorista-, Nasrala era una de las piezas más codiciadas por la seguridad israelí. Especialmente desde la guerra de 2006, tras la que pasó a la clandestinidad y vivía en ubicaciones secretas.
Nasrala nació en una familia chiita del sur de Líbano. Su formación política y religiosa estuvo influenciada por el movimiento islámico chiita y el clérigo iraní Ruhollah Jomeini, líder de la Revolución Islámica en Irán de 1979. Nasralá se unió a Hezbolá en los primeros años de la organización, creada en 1982 durante la operación israelí de Líbano, como fuerza de choque para sus intereses en la región.
De hecho, este miércoles, el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jamenei, ha aseguró que el destino de la región de Oriente Próximo «habría sido diferente» de no ser por la presencia de «grandes» figuras como el líder de Hamás, Yahya Sinwar, o Hasán Nasrala.