El drama de una ex concursante de ‘Top Chef’ para conservar su lengua

Shirley Chung, concursante de la edición estadounidense de Top Chef, está contando el complicando momento que está viviendo tras serle diagnosticado un cáncer de lengua. Por desgracia, el primer tratamiento que los médicos le aconsejaron fue amputar, pero su determinación le ha llevado a elegir otro camino más duro para curarse mantener intacto el órgano.

El programa de cocina, que en España se emitió en Antena 3 y presentó Alberto Chicote, ha convertido a la cocinera de origen chino en un personaje bastante conocido en USA, por lo que su historia está conmoviendo a todo el país. En sus redes sociales ha ido contando todo el proceso, que comenzó con un problema provocado después de haberse mordido la lengua de forma muy intensa, tanto que incluso le llevó a tener que implantarse un diente.

El gran ritmo de trabajo le hizo no acudir a un especialista, por lo que desde el mes de diciembre y hasta mayo pensó que todo había pasado, pero no fue así. Tras descubrir unas úlceras en la boca, el cirujano que le trató descubrió que tenía una tumor en la boca, algo mucho más grave de lo que ella podía esperar en ningún caso.

 

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Tras semanas de pruebas, la ex concursante de Top Chef recibió en el mes de junio recibió un pronóstico nada esperable, ya que la única opción que le daban para salvarse era amputar la lengua, una noticia que le hizo derrumbarse por completo. Por suerte, su doctor le habló de la pequeña posibilidad que existía gracias a un a un tratamiento alternativo gracias al que otro chef había conseguido curarse solo con el tratamiento con radiación y quimioterapia, pero debía mudarse a Chicago.

Shirley y su familia no lo dudaron y decidieron ir a por todas para conseguir su curación y no perder el habla. Es por eso que desde hace dos meses las visitas al hospital para recibir las inyecciones son casi como su jornada laboral, ya que debe ir al centro médico cuatro veces por semana. Según cuenta en Instagram, las noticias son buenas, ya que el tamaño del tumor se está reduciendo y ha recuperado la capacidad del habla que había perdido meses atrás, además de poder comer con cierta normalidad.

El shock que vivió nada más conocer el diagnóstico fue tan duró que reconoce que tardó dos semanas en decidirse a contarle a sus padres la noticia. Durante ese tiempo solo su hermana y sus amigos más íntimos lo sabían, siendo los momentos en los que estuvo peor.

 

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Ahora, mucho más optimista, ha compartido un mensaje de esperanza en el que asegura que con el apoyo y el amigo de sus seguidores podrá volver a a su vida en el año 2025 completamente recuperada. De esta experiencia se lleva, según sus palabras, el aprendizaje de que no siempre debe ser fuerte, ya que también se debe permitir ser débil y dejarse ayudar por los demás en algún momento.

En su cuenta de Instagram ha compartido la imágenes en las que se rapa el pelo junto a sus familiares en su propio restaurante.