Comida preparada rica y artesana para estresados de la vida

Da igual que usted resida en una gran urbe que en una población mucho más pequeña: el ritmo de vida es complicado, frenético y deja poco lugar para cosas tan necesarias como comer bien y rico. Si uno pasa ocho horas en el trabajo, otro buen rato en el coche o en el transporte público y tiene que atender a sus retoños, si los tiene, diseñar platos medianamente elaborados, equilibrados, saludables y que estén buenos es harto complicado. Podría parecer que es difícil ser gourmet a tiempo completo, y muy caro, pero hoy venimos a proponerles alguna idea de buenas marcas de comida preparada si no les da la vida, a precios razonables y con el toquecito a casero que usted se merece. Y sano, sano, que ahora queremos estar como robles y no morirnos nunca.

Una marca que está haciendo muy bien las cosas es Campo Rico, una empresa de Burguillos (Sevilla) especializada en platos vegetales terminados que están de miedo. No usan conservantes artificiales ni colorantes, y preparan exquisiteces como los pimientos rojos asados (sublimes), pisto, espinacas con garbanzos, brócoli salteado o un montón de purés que, con estos fríos, vienen de miedo. Acaban de sacar una línea de ensaladas con un formato muy cómodo, y preparadas como Dios manda, con su AOVE y sin porquerías dañinas para la salud.

Las hay exóticas como la de mango y remolacha, o tan andaluzas como las clásicas, infalibles papas aliñás. Tienen sus sellos veganos, kosher y halal, y una gama BIO, con ingredientes procedentes de agricultura ecológica certificada, para los que quieren también mimar al planeta.

Otra compañía que le va a salvar más de una cena o un brunch es la gallega Campomayor. Empezaron en 1942 con una pequeña granja avícola de 300 gallinas, y hoy son un referente de innovación alimentaria en torno al huevo: colaboran con el mismísimo CSIC. Fueron los primeros, en 2017, en lanzar el huevo a baja temperatura estandarizado para el consumidor final (por entonces, solo se comercializaba para alta cocina). El resultado es de lujo: un huevo de yema melosa y clara cuajada, que se regenera en un pispás. Con un molletito calentito con jamón, o con un aguacate si usted es fan de esta fruta, queda de miedo. También venden huevos enriquecidos con Omega 3, cosa muy útil si es usted vegetariano ovoláctico y no come pescado.

Un referente de la buena comida preparada es, por supuesto, Senén González y sus archifamosas tortillas. Empezó en 2011, acercando al gran público nacional los ricos pintxos, las tapas y la premiadísima tortilla de su famoso restaurante Sagartoki. En la última década ha. ido sumando premios y éxitos, y hace un par de años se hizo con el honor de tener la mejor tortilla del lineal de supermercados, según la OCU. Pero es que hace poco ha sacado un inventazo: la tortilla en lata, con los mejores ingredientes (AOVE, huevos camperos, sal, patata y cebolla) pero envasada para conservarla, sin frío, durante 12 meses. Erasmus, visitantes foráneos y estresados de la vida sin ganas de cocinar podemos darnos por satisfechos. Y otro consejito: no se pierdan el pintxo de huevo frito, es como una caricia de madre en el estómago.

Los frutos secos son ahora el nuevo maná, porque dan energía como para aguantar 40 años o más en el desierto, que es más o menos el equivalente calórico de los runner o de los que se enganchan al crossfit, que de todo tiene que haber. Si consume una buena cantidad, sabrá que no son muy baratos (a no ser que coma usted, básicamente, cacahuetes). Si quiere precios razonables, buena calidad y sabores curiosones, dese una vuelta por la web de nut&me.

Venden online toda clase de almendras, nueces, pecanas, anacardos y todo tipo de mixes, e incluso harinas elaborados con estos alimentos (la de almendra va fenomenal en repostería).

Y si usted es goloso, no se pierda las cremas de frutos secos, con propuestas tan golosas como la que sabe a rollito de canela, a golden milk (cúrcuma) o la que sabe a galleta, que en realidad contiene almendras, anacardos y dátiles. Engordar, engordan. Pero sanas y ricas son un rato.