Las ‘amistades peligrosas’ de Ceferin

Ilham Aliyed es presidente de la República de Azerbaiyán desde 2003. Aupado por el petróleo, este oligarca ha llevado a su país a un enorme crecimiento económico en las últimas décadas, aunque al mismo tiempo se ha cobrado deudas históricas con vecinos de región como Armenia, país con el que mantiene un conflicto bélico que se extiende a un siglo con sanguinarias consecuencias.

El presidente de Azerbaiyán, aliado del mandatario turco Erdogan, se ha hecho un nombre en el fútbol europeo gracias a una estrecha amistad con el presidente de la UEFA Aleksander Ceferin. Desde que el mandatario esloveno entró en su actual cargo en 2016, Bakú ha acogido la final de la Europa League de 2019, así como tres partidos de la fase de grupos de la Eurocopa 2020 y uno de cuartos de final, sin olvidarse de que albergó los partidos de Champions League del Qarabag durante la temporada 2017/18.

Ceferin no dudó en acudir recientemente a la sede de Bakú para ver en directo el partido entre Gales y Turquía. En el palco, se pudo ver al máximo mandatario de la UEFA acompañado por Aliyed y Erdogan en una imagen que ha sido condenada en diversos círculos diplomáticos internacionales. El jefe de la organización de la Eurocopa alabó las instalaciones de la sede –curiosamente construidas por empresas turcas–, al tiempo que abanderó uno de sus mantras para ganarse a las federaciones pequeñas europeas. «Esto demuestra que los grandes partidos se pueden hacer lejos de sedes como Inglaterra o Alemania. El fútbol está en todas partes y es de la gente», dijo.

Ceferin, amigo de los petrodólares

El máximo dirigente de la UEFA, que no tiene reparos en exhibir su cercanía con los petrodólares significado en su estrecha relación con los dueños del Paris Saint Germain o del Manchester City, sigue acumulando fotografías de dudosa reputación. Ceferin es perfectamente consciente de que ni Aliyed ni Erdogan son unos santos.

Precisamente, el primero de ellos controla ininterrumpidamente Azerbaiyán desde 1993 con ‘elecciones democráticas’ primero a través de su padre Heyder como caudillo y posteriormente sucediéndole en el cargo de presidente a su muerte en 2003. Los vínculos de la familia con organizaciones como la KGB son patentes hasta tal punto que su padre dirigió la agencia en Azerbaiyán desde 1964 y luego fue también presidente del país durante el dominio de la URSS desde 1969 a 1982. Todos esos años estuvieron salpicados por un conflicto contra Armenia que todavía no ha terminado y que se ha cobrado miles de vidas.

Ceferin no ha tenido problemas en juntarse con un dirigente que ha utilizado el dinero del petróleo de Azerbaiyán para ir comprando voluntades para traer eventos para su país al mismo tiempo que continúa una guerra en pinza contra Armenia con la cooperación de Turquía. La foto del palco y el día de la visita del presidente de la UEFA no fueron casualidades. En ese palco no sólo se habló de fútbol.