El preso más viejo de ETA que Sánchez quiere acercar mató a dos guardias, un policía y un militar
El preso de ETA con más edad (75 años) que será acercado a una cárcel del País Vasco -ahora se encuentra en la de Villabona (Asturias)- por el Gobierno socialista de Pedro Sánchez es el sanguinario integrante del ‘comando Vizcaya’ Sebastián Echániz Alcorta, alias Sebas. Este etarra ha llegado a acumular penas que suman 125 años de cárcel por cuatro asesinatos: dos guardias civiles, un policía y un militar.
En el año 2006, el Tribunal Supremo confirmó la condena a 26 años y medio de cárcel impuesta por la Audiencia Nacional a Echaniz Alcorta, junto a José Antonio Borde Gaztelumendi y Enrique Letona Viteri Masillas por asesinar en julio de 1981 con cinco tiros al guardia civil jubilado Joaquín Gorjón González en la estación de tren de Basauri (Vizcaya). Estos tres integrantes del ‘comando Vizcaya’ también fueron condenados a 36 años y 10 meses de cárcel por el asesinato del teniente coronel retirado de la Guardia Civil Luis Cadarso el mismo año y en la misma localidad vizcaína.
En 2007 fueron condenados de nuevo estos tres etarras a 28 años de prisión cada uno por participar en tareas de vigilancia e infraestructura para la comisión del atentado que costó la vida al teniente coronel del Ejército Ramón Romeo Rotaeche cuando salía de la basílica de Begoña en Bilbao en 1981.
Y la Sala de lo Penal del Tribunal Supremo confirmó también en 2007 otra condena de 35 años de prisión impuesta por la Audiencia Nacional a Echániz Alcorta por un delito de asesinato y otro de utilización ilegítima de vehículo de motor, en relación con su participación en el atentado contra el jefe de la Policía Municipal de Baracaldo (Vizcaya) José Aibar Yáñez el 30 de junio de 1982.
El criminal Echániz Alcorta ha estado acusado de intervenir presuntamente en atentados que mataron a catorce personas, aunque sólo ha sido condenado por esos cuatros asesinatos. Fue detenido en Nicaragua el 25 de marzo de 1993 y expulsado a España junto a otros tres presuntos etarras. Tras ser juzgado y absuelto en una de las causas que tenía abiertas, por un error judicial se decretó su puesta en libertad que se hizo efectiva el 13 de junio de 1995, circunstancia que aprovechó para huir a Venezuela. En este país permaneció fugado hasta que fue arrestado el 16 de diciembre de 2002 y entregado a España.
21 enfermos graves
En concreto, un total de 24 presos de ETA, incluido Echániz cumplirían los requisitos anunciados este miércoles por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, para iniciar el proceso de acercamiento de los reclusos a cárceles del País Vasco. El jefe del Ejecutivo socialista avanzó en una conversación informal con periodistas en el Congreso de los Diputados que primero serán acercados los presos de ETA mayores de 70 años o enfermos graves.
Además de Echániz, hay otros dos presos que ETA que superan los 70 años de edad: Santiago Arrospide Sarasola, Santi Potros, condenado por la masacre de Hipercor; y Joseba Arregi Erostarbe, Fitipaldi. Y luego son 21 reclusos de la banda terrorista los que tienen enfermedades graves, según los datos que maneja el colectivo de familiares de los presos etarras.
En la actualidad, cumplen prisión en centros penitenciarios españoles un total de 239 reclusos por acciones terroristas de la banda, de los que 230 pertenecen al Colectivo de Presos de ETA (EPPK); seis son disidentes, enmarcados en el entorno del autodenominado «Movimiento por la Amnistía y contra la Represión»; y tres pertenecen a la ‘Vía Nanclares’, los arrepentidos que se han desvinculado de la banda.