Montero no logra ni el apoyo de las comunidades del PSOE a su proyecto de financiación autonómica
Sánchez tiene previsto tratar el tema en la próxima Conferencia de Presidentes de La Palma
Hacienda propone ampliar el peso de Educación y Sanidad en el nuevo sistema de financiación autonómica
La cuestión de la financiación autonómica amenaza con ser uno de los principales quebraderos de cabeza de Pedro Sánchez en los próximos meses. Ni los suyos ni la oposición aprueban la propuesta que la ministra de Hacienda y Función Pública, María Jesús Montero, mandó esta semana a las autonomías. Unos la consideran «un punto de partida insuficiente» y los otros «una tomadura de pelo». Hay tarea por delante para desactivar una mina de bombas antes de la Conferencia de Presidentes de La Palma, donde éste será uno de los temas destacados . Los gobiernos socialistas, populares y nacionalistas quieren más dinero para hacer frente a los servicios que ofrecen a los ciudadanos.
El documento que ha remitido Montero no ha gustado ni a las comunidades gobernadas por el PP, ni a las del PNV, PRC y ERC. Ni siquiera a las de su propio partido. Mientras las comunidades en manos de populares, peneuvistas, regionalistas y separatistas rechazan de pleno la propuesta de Hacienda, las del PSOE lo acogen con recelos y como base de «un trabajo muy largo por hacer». Todas coinciden en que perderán poder adquisitivo y que eso va en detrimento de su autonomía. Pocas veces las diecisiete comunidades se ponen de acuerdo pero en la cuestión económica, aunque por razones distintas, van camino de hacerlo contra las intenciones del Gobierno.
Hace varias semanas que autonomías de distinto color político trabajan conjuntamente para frenar esas intenciones que tiene Moncloa respecto a la nueva financiación. El temor a que territorios como Galicia, Asturias, La Rioja, Aragón, Cantabria, Castilla y León, Extremadura o Castilla-La Mancha vean cercenados sus ingresos, provocó que hace unos días se reunieron en Santiago para fijar una posición común. En esta cuestión Sánchez y Montero tiene pocos aliados, por muchos toques de corneta que sus lugartenientes en Ferraz, Adriana Lastra y Santos Cerdán, se encarguen de hacer.
Uno de los principales choques, más allá del que hace años está abierto entre Cataluña, el País Vasco y el resto de autonomías, será el que enfrentará a los territorios del eje Atlántico con los del eje Sur. La situación y las necesidades de las autonomías del norte de España, con una población más dispersada y envejecida, hace que sus prioridades y peticiones sean distintas de otras regiones. Algunos de los presidentes norteños, en conversación con OKDIARIO, recuerdan que tienen mayor gasto en educación o sanidad fruto de la diseminación de municipios y aldeas, algo que encarece los servicios que prestan. Aunque la última propuesta recoge una mayor inversión, reclaman a Montero que vaya un paso más allá, ya que las grandes ciudades siempre se ven beneficiadas. Sin embargo Madrid aporta el 68% del coste de ambos servicios en otras autonomías.