España
Congreso de los Diputados

El Congreso aprueba reformar las lenguas cooficiales después de haber permitido su uso

El Congreso de los Diputados ha aprobado el uso de las lenguas cooficiales después de que la presidenta de la Cámara Baja, la socialista Francina Armengol, haya permitido su uso en el Pleno de este martes y antes de que la resolución saliera adelante. La iniciativa ha salido adelante con el voto a favor de la mayoría de la Cámara: PSOE, Sumar, ERC, Junts, Bildu, PNV, el BNG y Coalición Canaria.

PP, Vox y UPN han votado en contra de esta resolución y han criticado su trámite por la vía de urgencia. La reforma del reglamento de la Cámara Baja ha contado con 176 síes, 169 noes y 2 abstenciones. A partir de ahora se abre un plazo de 48 horas para presentar enmiendas a la totalidad y enmiendas parciales. Estas enmiendas serán rechazadas, previsiblemente, en el debate que tendrá lugar este jueves en el Congreso.

Con esta resolución se implanta el uso del catalán, euskera, gallego, bable y aranés en los plenos, las comisiones, y en todas las iniciativas, que deberán requerir de traducciones. Además de aprobar esta reforma, sus partidarios han logrado también que se haga por el procedimiento de lectura única, es decir, de una tacada, en el Pleno sin pasar por la Comisión de Reglamento, que aún no se ha constituido.

«Inaceptable»

El PP se ha opuesto a esta reforma del reglamento del Congreso al considerarlo «inaceptable» y que «atenta contra el sentido común». Así lo ha defendido desde el estrado el portavoz nacional de los populares y vicesecretario general de Cultura y Sociedad Abierta, Borja Sémper, que ha acusado a los socios del Gobierno de Pedro Sánchez de estar usando «nuestro patrimonio lingüístico de manera torticera».

«El gallego, el valenciano, el euskera o el catalán son también lenguas españolas, junto al castellano, que es nuestra lengua común. Tenemos la suerte de que España mantiene vivas una variedad de lenguas. No vamos a aceptar lecciones sobre respeto a las lenguas cooficiales, ni su patrimonialización interesada», ha afirmado Sémper en alusión al PSOE y a sus socios separatistas.

También ha recalcado que esta reforma exprés se ha realizado mediante lectura única y sin pasar por la debida Comisión de Reglamento. «Yo en casa vivo rodeado de euskera, mis hijos hablan en euskera, leen cuentos en euskera, viven en distintos idiomas de manera natural. No es un problema la diversidad. A mí me enriquece», ha enfatizado.

Abandono de Vox

Por su parte, Vox ha escenificado su profundo rechazo al uso de las lenguas cooficiales abandonando el hemiciclo. Ha ocurrido cuando ha tomado la palabra el diputado del PSOE por Lugo José Ramón Besteiro, que ha intervenido desde el estrado en gallego. «Es un doble honor hacerlo en mi lengua materna, el gallego», ha destacado Besteiro.

Tras esto, la portavoz de Vox en el Congreso, Pepa Millán, ha pedido tomar la palabra pero Francina Armengol se lo ha denegado para que no interrumpiera al orador. «Le ruego que se siente y que dejemos hablar al señor Besteiro. Este es el templo de la palabra y el uso de palabra lo tiene el señor Besteiro», ha señalado la dirigente socialista, lo que ha llevado a los diptuados de Vox a abandonar sus escaños y a salir del hemiciclo. Los diputados del PSOE y de Sumar, así como los miembros del Gobierno presentes, han aplaudido las palabras de Armengol mientras los de Abascal iban dejando uno a uno los pinganillos en el escaño de Sánchez.

«Hoy he abandonado el pleno del Congreso junto al resto de diputados de VOX, indignado al escuchar la lengua de mis abuelos, el gallego, utilizado como herramienta de odio y de división. Y en protesta por la forma que tienen de pisotear las leyes las mayorías golpistas», ha destacado el líder de Vox, Santiago Abascal, en redes sociales minutos después de esta protesta.

Pepa Millán ha atendido a los medios en el pasillo del Congreso tras abonar el hemiciclo. «Se está vulnerado la legalidad vigente, se está tramitando con una iniciativa que aún no está aprobada la introducción de lenguas, que son cooficiales en sus respectivas regiones. Estamos asistiendo a la exaltación de la división, del enfrentamiento con el dinero de todos los españoles, y nosotros no vamos a ser cómplices de esta ruptura de la convivencia, que al final es lo que pretenden escenificar, pasándose el reglamento por el forro de la chaqueta», ha defendido.