Iglesias y Errejón ni se miran en el Congreso a pesar de estar sentados juntos
Pablo Iglesias e Íñigo Errejón no han intentado ocultar sus diferencias a lo largo del pleno en el Congreso este martes. Según han revelado fuentes parlamentarias a OKDIARIO, «la tensión entre los dos era más que evidente». Es más, «no se han hablado y tampoco se han mirado».
Las mismas fuentes subrayan que, al estar Errejón sentado entre Iglesias e Irene Montero, ambos mantenían conversaciones y compartían comentarios «ignorando» al secretario de Política de su formación. «Como si fuera totalmente transparente» añaden.
En los momentos de descanso, ambos políticos tampoco han abandonado el hemiciclo juntos en ningún momento, «ni para tomar un refrigerio, ni para estirar las piernas», «absolutamente nada».
Algunos diputados han destacado la desgana de ambos al «aplaudir tímidamente» las intervenciones del otro. Fuentes del Congreso destacan que en la mesa de portavoces en la que se encontraban Montero y Errejón, tampoco se vio gesto alguno entre ambos dirigentes de la formación morada.
Esto ocurre la misma semana en la que se disparan los rumores de una profunda crisis, llegando a hablar de ruptura entre Iglesias y el que hasta ahora ha sido su mano derecha, Íñigo Errejón. Aun así, sorprende que ni siquiera hayan intentado aparentar una cierta cordialidad, tal como insisten en mostrar según los tuits que ambos se lanzan desde que comenzaran las informaciones.
Se da la circunstancia que el secretario general de Podemos remitió este mismo martes una carta a los suyos donde pide unidad y advierte a los sectores más críticos de la formación de que tomará «decisiones difíciles». Algo que según ha podido saber este diario, no ha sentado nada bien a los ‘errejonistas’, que han entendido en estas líneas de Iglesias un nuevo: «El que se mueva no sale en la foto».
Los seguidores de Errejón consideran que Iglesias se refiere en las amenazas de su carta a Sergio Pascual, secretario de Organización del partido morado. Temen que el secretario general tome contra él esas «decisiones difíciles» que anuncia en su carta.
Lo cierto es que el hasta ahora número dos de Pablo Iglesias ha ido perdiendo poder a favor de Irene Montero y Rafa Mayoral, en los que el secretario general confía absolutamente las gestiones del partido. Este hecho es el que ha creado el cisma en las filas del partido morado que ha vivido su punto más álgido tras la dimisión de nueve dirigentes de Podemos Madrid.
Precisamente, este miércoles se ha convocado al Consejo Ciudadano de Podemos Madrid, su primera reunión tras la renuncia de los miembros de la formación madrileña.