Decenas de miles de personas toman Pamplona contra la dictadura lingüística de Uxue Barcos
Los navarros han salido a la calle este sábado contra la política lingüística del gobierno nacionalista vasco de Uxue Barcos. Miles de personas —más de 30.000 según los convocantes y 25.000 según Policía Nacional— han respaldado este sábado una manifestación por las calles de Pamplona.
La marcha, que ha sido convocada por la Asociación Cultural Doble 12, Desolvidar y Vecinos de Paz, se ha desarrollado bajo el lema ‘Por el futuro de todos, en igualdad’. Ha partido a las 18.00 horas del paseo Sarasate, frente al Parlamento de Navarra, precedida de una gran bandera de Navarra y entre los aplausos de los asistentes. Su recorrido ha pasado por Yanguas y Miranda, plaza de la Paz, Conde de Oliveto, plaza Príncipe de Viana, avenida de San Ignacio y Cortes de Navarra para finalizar en la avenida Carlos III, frente al Palacio de Navarra donde se ha leído un comunicado.
Los manifestantes han portado banderas de España y de Navarra y han coreado consignas como «¡No imposición, libre elección!», «¡Navarra entera, montaña y Ribera!» o «¡Esto no es Euskadi, es Navarra!». También se han gritado vivas a Navarra y España además de a la Policía Nacional y la Guardia Civil. La movilización ha contado con la participación de representantes de UPN, PSN, PPN y Ciudadanos así como de la delegada del Gobierno en Navarra, Carmen Alba.
La marcha ha culminado en la plaza del Castillo frente a un escenario donde ha habido un recital de jotas. Allí, el representante de la Asociación Doble 12, Ricardo Guelbenzu, ha leído un comunicado en el que ha acusado al Gobierno de Navarra de «favorecer a unos pocos a costa de perjudicar a la mayoría. Eso es discriminar».
Ha recalcado que esta manifestación «no es un ataque a Navarra como algunos dicen» sino que «luchamos por una Navarra inclusiva donde se respete los derechos de todos, cuestión que no hace el Gobierno de Barcos». Asimismo ha remarcado que todos los asistentes a la movilización «somos de aquí» y «por eso queremos un euskera sin banderas, que no divida, que no discrimine y que sirva tan sólo para comunicarse, como cualquier otro idioma».
«El euskera forma parte de nuestra cultura pero es hablado por una minoría en Navarra», ha continuado Guelbenzu que ha asegurado que a los convocantes de la movilización «sí nos interesa el euskera, es al Gobierno de Navarra al que no le importan nuestros derechos». Un gobierno «ciego y sordo a lo que siente una mayoría social», ha agregado.
Ha asegurado que el Ejecutivo foral ha seguido «una hoja de ruta que nos lleva al barranco en que se están estrellando otras comunidades autónomas al no entender que favorecer a los euskaldunes equivale a discriminar a los castellanoparlantes».
El representante de la Asociación Doble 12 ha explicado que la Carta Europea de Lenguas Minoritarias «busca evitar la discriminación por razón de lengua y señala tres vías de trabajo: la traducción, la formación y la política de traslados» lo que implica «ofertar en la administración plazas para traducir en caso de necesidad, no para valorar el idioma en todas las ocasiones». Por otro lado, «la formación implica un derecho para todos igual y la preferencia a un traslado es para irse desde donde no se habla euskera hacia donde se habla, pero nunca al revés», ha remarcado.
«Pretenden adueñarse de la estructura funcionarial de Navarra cambiando la política de traslados», ha censurado Guelbenzu que ha resaltado que las leyes establecen que el acceso a la función pública «deberá cumplir con tres principios rectores: la igualdad, el mérito y la capacidad, sin discriminación alguna».
En este sentido, ha opinado que «en la gran mayoría de puestos no debería ser contemplado como mérito el hablar euskera» porque este idioma «ni se necesita ni se usa tanto». «Al dar un peso desproporcionado al euskera impiden en la práctica el acceso en igualdad de condiciones a la función pública al discriminar a las personas castellanohablantes», ha afirmado.
De la misma manera, ha censurado la «discriminación» en la Educación «con las OPE denunciadas» y ha aseverado que «buscan llenar la enseñanza navarra de profesores euskaldunes, muchos de ellos de la comunidad vecina por delante del resto de docentes navarros no conocedores del vascuence».
«Libertad significa que tan legítimo es elegir estudiar algo como no hacerlo», ha continuado Guelbenzu que ha acusado al Gobierno, en sus OPE, de «impedir las legítimas aspiraciones de una mayoría que ha optado legítimamente por no estudiar vascuence».
El Gobierno de Navarra «confunde fomentar con imponer». «El euskera lo utilizan para favorecer el acceso, los ascensos e incluso los traslados de los funcionarios, y ahora estas malas prácticas también las pretenden imponer a las empresas privadas mediante la nueva Ley de Contratos con las Administraciones Públicas, que es una vergüenza», ha criticado.
«Hoy estamos aquí para no permitirlo», ha destacado Guelbenzu que ha llamado a trabajar por «una convivencia desde el respeto a la diversidad ideológica y de otra índole de todos los navarros».