Armengol blinda a Sánchez en el Congreso para que no rinda cuentas de las votaciones que incumple
PSOE y Sumar vetan en la Mesa tres propuestas del PP para la confección del I Plan de Parlamento Abierto
"Se trata de un nuevo intento de amordazar al principal partido de la oposición", denuncian fuentes del PP
La mayoría de PSOE-Sumar que controla la Mesa del Congreso de los Diputados, con la presidenta socialista, Francina Armengol, al frente, ha salido al rescate del Gobierno de Pedro Sánchez para que no tenga que rendir cuentas de los mandatos parlamentarios que incumple. Un compromiso de transparencia que propuso el PP en el marco del I Plan de Parlamento Abierto del Congreso de los Diputados (2024-2027) que se está elaborando, pero que ha sido rechazado por los partidos que sostienen al Ejecutivo.
En concreto, la Mesa del Congreso, dentro de la Alianza de Gobierno Abierto que pretende impulsar administraciones públicas más transparentes, inició el pasado año los trabajos para la confección del citado Plan, el primero de estas características que se quiere implantar en la Cámara. De esta manera, en abril de 2024, el órgano de gobierno de la Cámara acordó elaborar una primera propuesta del Plan -ya accesible en la web- con aportaciones de los grupos parlamentarios. Para luego ser sometida a consulta pública (ciudadanía y organizaciones de la sociedad civil), como está ocurriendo ahora desde el pasado 16 de enero hasta el próximo jueves día 30.
De esta manera, la Mesa abrió el pasado junio el plazo para que los grupos parlamentarios pudieran presentar sus aportaciones en cada uno de los cinco ejes (transparencia y acceso a la información; participación y colaboración ciudadana; integridad y rendición de cuentas; sensibilización y formación, y gobernanza del plan de Parlamento Abierto). Fue aquí, cuando la mayoría de la Mesa, esto es, los representantes de PSOE y Sumar, liderados por Armengol, decidió suprimir tres de las propuestas presentadas por el PP, según fuentes parlamentarias.
Entre estas iniciativas del Grupo Popular que han sido vetadas se encuentra, por ejemplo, una que guardaba relación con un aspecto tan importante como es la rendición de cuentas del Gobierno ante la Cámara, para, entre otras cosas, informar de forma obligada sobre cómo está cumpliendo el Ejecutivo los mandatos y resoluciones aprobados por el Congreso. Aquí se enmarcan desde las proposiciones no de ley de la oposición que salen adelante hasta las mociones o las resoluciones de los debates del Estado de la Nación.
El PP reclamaba así la inclusión de este punto: «Regular la remisión trimestral por parte del Gobierno de Informe sobre el grado de cumplimiento de las resoluciones o mandatos de orientación política aprobados por la Cámara, en pleno y Comisiones».
El caso de Edmundo González
Se da la circunstancia de que el Gobierno de Sánchez viene haciendo oídos sordos a tales mandatos de manera sistemática. Por ejemplo, el pasado 11 de septiembre el Congreso aprobó una proposición no de ley (PNL) del PP -apoyada por Vox, PNV, Coalición Canaria y UPN- instando al Gobierno a reconocer a Edmundo González como presidente electo de Venezuela. Sin embargo, el Ejecutivo de Sánchez todavía no lo ha hecho.
Las otras dos propuestas del PP en materia de transparencia que han sido vetados en la Mesa guardan relación con la publicación de las «iniciativas legislativas aprobadas» y de las «iniciativas de orientación política», y con regular la obligación de comparecencia del ministro de Presidencia en la Comisión Constitucional del Congreso para dar cuenta del Plan anual normativo. También expondría aquí el Informe de cumplimiento del Plan anual normativo del año anterior.
La «hipocresía» de Armengol
A pregunta de OKDIARIO sobre este veto en la Mesa, fuentes del PP denuncian que no se puede pretender un Parlamento abierto cuando la mayoría en la Mesa que apoya al Gobierno cierra la boca al principal partido de la oposición». «Se trata de un nuevo intento de amordazar al principal partido de España y de la oposición, y de tapar los múltiples incumplimientos de Sánchez con las resoluciones que aprueba el Congreso», remarcan.
Así, las fuentes del PP lamentan que «estamos ante otro gesto más de hipocresía de la señora Armengol, que intenta vender en Europa un Parlamento más abierto cuando en realidad ampara al Gobierno de Sánchez en su opacidad e incumplimientos reiterados», apostillan.
Una vez que el próximo jueves 30 de enero concluya el plazo para las aportaciones ciudadanas -que se envían a la dirección de correo facilitada en la web del Congreso-, la Cámara publicará un «informe resumen de las propuestas recibidas y las acciones derivadas de estas». Entonces se podrá ver si PSOE y Sumar vetan también propuestas ciudadanas en la misma línea que las tres tumbadas al PP.
Y es que la falta de imparcialidad de la presidenta del Congreso, en el ejercicio de su cargo institucional, ha generado polémica desde que asumió el cargo en agosto de 2023. Sin ir más lejos, el pasado miércoles, reaccionó así en redes sociales al hecho de que la Cámara -con los votos de PP, Vox, Junts y PNV- rechazara dos decretos económicos del Gobierno de Sánchez. «El Partido Popular tendrá que explicar muy bien cuáles son los motivos por los que vota en contra de mantener la gratuidad del transporte público en Baleares o de mejorar la capacidad adquisitiva de los y las pensionistas. Algunos trabajamos por la ciudadanía. ¿Para quién la hace el PP?», escribió en alusión al decreto ómnibus (cajón de sastre).
Ante ello, el portavoz del Grupo Popular en el Congreso, Miguel Tellado, le contestó: «¿Pero esto qué es? La ministra número 23 pidiendo explicaciones al grupo mayoritario por su voto. Usted no es presidenta, sino la delegada del Gobierno en el Congreso. Váyase», apostilló. El PP ha pedido aprobar por separado y sin chantaje alguno cada una de las medidas del decreto ómnibus, como la revalorización de las pensiones, pero Pedro Sánchez se niega, de momento.