El mercado residencial europeo sigue atrayendo a los grandes inversores
El sector residencial ha sido uno de los segmentos inmobiliarios que mejor ha resistido a la crisis del Covid, algo que no ha pasado desapercibido para los inversores. No obstante, en gran parte de los mercados residenciales europeos las oportunidades de inversión son escasas; por ello, los grandes ‘players’ ha comenzado a centrarse en activos de nueva construcción. Esta tendencia se da especialmente en Europa Central, España o Irlanda, donde ha cobrado gran importancia el ‘build to rent’ (construir para alquilar).
En este sentido, la firma DWS destaca en el informe ‘The case for European Residential’ que durante la última década el sector residencial se ha alzado como uno de los protagonistas en las inversiones institucionales. Sin embargo, «el sector no solo ha registrado algunos de los rendimientos más altos de Europa en los últimos años, sino que la percepción del sector residencial como una inversión refugio se ha reforzado durante la pandemia».
De cara a los próximos diez años, DWS vaticina que el sector residencial continuará proporcionando a los inversores algunos de los rendimientos más altos en el Viejo Continente.
En los últimos años, los volúmenes de inversión de sector residencial -incluido el mercado del alquiler- han aumentado significativamente, al igual que la lista de inversores que apuestan por este segmento. En 2020, loas operaciones de activos residenciales representaron el 20% del total de las transacciones inmobiliarias, lo que supone un 10% más que en 2010. En este sentido, los crecimientos en inversión más elevado se han dado en Reino Unido y España.
Brecha en el mercado de alquiler
Aunque el escenario varía según cada mercado, las tasas de cobro de los alquileres de viviendas en Europa se mantuvieron estables durante el año pasado. En concreto, en torno al 90% respecto a niveles previos a la crisis. Por el contrario, la tasa de cobro de alquileres de activos comerciales y hoteles sufrieron importantes caídas, a consecuencia de los cierres y las restricciones de movilidad.
Por otro lado, el informe destaca que la pandemia ha provocado que en muchas ciudades europeas la oferta de viviendas para alquiler no ha podido seguir el ritmo de la demanda, lo que ha supuesto una ampliación de la brecha. Además, a esto hay que sumar que los visados y permisos para construir nuevos desarrollos residenciales se han reducido a la mitad, lo que provocará un mayor desequilibrio entre la oferta y la demanda.
Mercados más rentables
DWS revela que los mercados de los Países Bajos, Alemania y los países nórdicos se perciben como más estables, pero los rendimientos que proporcionan suelen ser más bajos.
Mientras que otros mercados «en maduración» como España, Reino Unido e Irlanda, los precios son atractivos y se pueden conseguir mayores rendimientos. Sin embargo, dada la creciente competencia en estos mercados, «la ventana de oportunidad para los rendimientos excesivos está comenzando a cerrarse», explica la firma.