Iberdrola podría gastar hasta 2.000 millones de euros para entrar en el mercado australiano
La energética Iberdrola quiere seguir creciendo y lo hará en Australia adquiriendo redes eléctricas. Eso sí, las autoridades australianas no se lo van a poner fácil porque es un activo de carácter público en futuro proceso de privatización en el que no van a dejar entrar a cualquier inversor que llegue. Fuentes de la propia compañía cotizada han declinado hacer declaraciones a OKDIARIO sobre esta posible operación australiana. Un movimiento que los expertos tildan de golpe maestro para Iberdrola y sus accionistas.
Los directivos de la energética, según medios de comunicación locales, ya habrían estado tanteando el terreno «in situ» y considerando el mercado australiano para sus futuros planes de crecimiento. Iberdrola planea hacer hacer una inversión de 24.000 millones de euros entre 2016 y 2020, de esta cantidad, 22.000 millones de euros corresponden a proyectos ya comprometidos y un 88% a áreas reguladas o con contratos a largo plazo. De acuerdo a estas cifras, Iberdrola podría gastar hasta 2.000 millones de euros en Australia.
Iberdrola tiene “como objetivo la expansión, el crecimiento, la estabilidad y la creación de valor al accionista”, según ha explicado a OK DIARIO Antonio Sales, analista de XTB. La inversión en energías limpias y renovables por parte de la eléctrica está siendo muy alta, «un factor que repercutirá de manera positiva y que dará sus frutos próximamente», explica a OKDIARIO Borja Matilla, analista de Hanseatic Brokerhouse.
No es un movimiento que extrañe a los expertos, los planes de diversificación e internacionalización de Iberdrola vienen de lejos y no lo achacan a la salida de Reino Unido de la Unión Europea (UE). “No creo que el Brexit haya empujado a la empresa a buscar nuevos puntos de crecimiento. Es una oportunidad porque Australia tiene un alto rango crediticio, solvencia y capacidad de gasto”, concluyen desde XTB. La energética presentó pérdidas en Reino Unido pero «se debieron a la decisión de cerrar la central de carbón de Longannet, factor clave por parte de la compañía y fiel reflejo del cambio estratégico que está llevando a a cabo centrándose en todo lo relacionado a las energías renovables y en las energías limpias», comenta Matilla.
¿En Bolsa? “Veremos si el valor, con tendencia lateral en Bolsa las últimas semanas remonta y alcanza cotas alcistas”, explica Sales. Los expertos concluyen que el movimiento de Iberdrola es «una gran apuesta y, sobre todo, un acierto total y pleno. Una jugada maestra que hará revalorizar más la acción y la organización. Más que compensar, creo que es una apuesta de futuro para ir dejando de lado poco a poco las energías menos limpias», expone Matilla.
Hoy el Ibex 35 no ha sido permeable a estos rumores australianos, el valor ni se ha inmutado y ha cerrado en números rojos con caídas del 0,03% y la acción a casi 6 euros.
Las autoridades australianas no se lo pondrán fácil
Las redes eléctricas al Oeste de Australia son un activo delicado para el país, tienen carácter público aunque por poco tiempo. Presumiblemente tras las elecciones estatales de 2017, este activo se va a someter a un proceso de privatización. Es por ello que las autoridades australianas son muy estrictas con las propuestas de inversores como, en este caso concreto, Iberdrola. Cabe destacar que dentro de cuatro escasos años, cerca del 70% del beneficio bruto de explotación de la empresa liderada por Ignacio Sánchez Galán se van a generar fuera de la UE. «Los mercados regulados son bastante beneficiosos para las energéticas como la de Sánchez Galán, así lo demuestran los datos», según XTB.
Aún falta un tiempo para las elecciones, pero el baile de posibles inversores ya se está poniendo en marcha. Cada una de las compañías está buscando la posición más favorable para convencer a Australia de que su experiencia en el sector es la más conveniente. Desde XTB creen que la inmersión de Iberdrola en un país como Australia es beneficioso para ambas partes, además, cree que la energética “tiene oportunidad de llevar a cabo la operación porque es un referente mundial en el sector de la energía y prima la profesionalidad”, a pesar de que las autoridades pertinentes sean tan exigentes.
Otras empresas y fondos de inversión ya han ido a buscar gloria y beneficio a Australia teniendo la pretensión de invertir en el sector energético. Es el caso de la empresa asiática China State Grid o el fondo Cheung King Infrastructure que querían comprar el 50,4% la empresa pública Ausgrid por 11.000 millones de euros. Tuvieron que volver a guardarlos en la billetera, el Tesoro del Estado australiano de Nueva Gales del Sur vetó inmediatamente la transacción al vislumbrar riesgos en la seguridad del suministro nacional.
Iberdrola cuenta con ventaja con respecto a otros competidores, pero aun así debería enfrentarse en la carrera por el sector energético con varios fondos como GIP, AMP Capital, QIC o Hasting. Todos están a la espera de que las autoridades se decidan si las empresas extranjeras pueden participar en las empresas públicas energéticas del país y en qué porcentaje.