Hacienda paga a la francesa Inetum 1,3 millones por más de 26.000 licencias de Microsoft

La Agencia Estatal de Administración Tributaria (AEAT) ha elegido a una multinacional tecnológica de capital francés, Inetum, para adquirir 26.239 licencias de Microsoft con las que acometer una nueva fase de renovación del software estratégico que utiliza en su día a día esta agencia del Ministerio de Hacienda. La operación acaba de cerrarla este organismo del Ministerio de Hacienda: pagará a Inetum 1,3 millones de euros por 26.239 licencias de uso de programas específicos del desarrollador estadounidense.

Este contrato se enmarca en el plan de renovación de licencias de uso de Microsoft que lleva a cabo la Agencia Tributaria desde hace años. Por ejemplo, según la documentación oficial a la que ha tenido acceso OKDIARIO, en 2019 recurrió a otro intermediario para adquirir idéntica cantidad de licencias.

Eso sí, en aquella ocasión a un precio mucho más reducido. El proveedor elegido fue la firma Specialist Computer Centres S.L., al que la Agencia Tributaria pagó 870.256,30 euros (IVA incluido) por otras 26.239 licencias del software Assurance de Microsoft. Ahora el importe asciende, exactamente, a 1.282.001,93 euros. Es decir, 412.000 euros más que en aquella otra operación de compra, un 47% más con cuatro años de diferencia, cuatrienio en el que se ha disparado el precio de este software.

Ahora el proveedor elegido ha sido Inetum España S.A., la filial española de la compañía francesa de servicios tecnológicos que pasó a tomar posiciones estratégicas en el mercado peninsular cuando, hace ahora dos años, en agosto de 2021, adquirió el 100% de Informática El Corte Inglés, la división tecnológica de ECI.

La gama Assurance de Microsoft

Fruto del contrato público con el que se ha hecho ahora, Inetum proveerá a esta agencia del Ministerio de Hacienda 26.000 licencias del software Microsoft Windows Server CAL, las pasarelas de acceso por clave a los servidores; 173 licencias de la aplicación Server Standard Core, que gestiona servidores; 44 de SQL Server Enterprise Core, un sistema de gestión de bases de datos relacionales; y otras 22 licencias del programa de Microsoft Visual Studio Ent MSDN, una herramienta especializada para desarrolladores. Todos esos programas pertenecen a la familia de productos Assurance de Microsoft, que utiliza en su día a día la Agencia Tributaria.

La ejecución de este contrato de compra de licencias informáticas ya se ha hecho efectivo, con máxima urgencia. Fue el pasado marzo cuando este organismo del Ministerio de Hacienda impulsó la adquisición de este software de Microsoft. El expediente se ha resuelto en apenas tres meses: el contrato fue formalizado el pasado 21 de junio –hace justo una semana– y esas licencias han sido suministradas en el plazo máximo de siete días que se marcó en las condiciones de la licitación.

Junto a Inetum, pugnaron por este contrato público otros cinco proveedores tecnológicos: Specialist Computer Centres S.L. –los que ganaron la licitación de 2019–, Crayon Software Experts Spain S.L., Seidor Solutions S.L., Telefónica Soluciones de Informática y Comunicaciones de España S.A.U., y la sociedad limitada Bechtle Direct.

Todas ellas ofertaron precios muy similares, pero el más bajo ha sido el de Inetum, que ha ganado al segundo clasificado –Specialist Computer Centres– por poco más de 900 euros de diferencia: Inetum ha ganado con una oferta de 1.059.505,73 euros sin incluir el IVA, mientras que la propuesta de Specialist Computer Centres ha ascendido a 1.060.422,84 euros, también sin contar el IVA.

Microsoft, posición dominante

Desde la Agencia Tributaria han subrayado que acometer esta renovación y actualización de las licencias de Microsoft que utiliza es un aspecto crítico, imprescindible. José Borja Tomé, director del Departamento de Informática Tributaria de la AEAT explica en un informe interno al que ha tenido acceso OKDIARIO que «no actualizar y disponer de versiones antiguas puede producir que el entorno donde se utilizan estos servicios quede obsoleto, con el consiguiente riesgo de seguridad y soporte, entre otros».

Asimismo, «no se considera realista pensar que, a corto plazo, se pueda sustituir el software de Microsfot por otra solución y, en ningún caso, antes del vencimiento del soporte extendido del sistema operativo actual, debido principalmente a la dependencia de las aplicaciones y servicios que se ofrecen desde los entornos centralizados como Intranet, escritorios virtuales y software adicional, con sistema operativo y navegador Microsoft». El contrato público millonario no pudo por tanto quedar en manos de una mercantil española.