El ecommerce da oxígeno al sector textil: el canal online ganó 2,7 millones de clientes en 2021
La moda española tiene un fuerte reconocimiento, tanto a nivel local como internacional, con altos estándares de calidad y diseño. A pesar de esto, ha sido uno de los sectores que más ha sufrido durante la pandemia, un periodo crítico que ha impulsado una transformación imparable en toda la cadena. Sin embargo, y pese a los malos datos del último trimestre, el canal online se ha consolidado como una de las principales vías de ventas, captando 2,7 millones de clientes en 2021.
En España, durante los primeros meses de 2021, la actividad comercial de los establecimientos de moda cayó alrededor de un 45% respecto al mismo periodo del año anterior, cuando todavía no se conocía el impacto que tendría finalmente el Covid-19. Casi dos años después, se empieza a vislumbrar la recuperación de la industria y las perspectivas son positivas y todo apunta a que el 2022 será año de crecimiento y en gran medida de consolidación para las marcas.
El cierre físico de las tiendas durante el confinamiento impulsó el crecimiento del comercio electrónico en España, frente al canal tradicional, una transformación del mercado, que ya venía siendo una tendencia sólida en los últimos años y que ha llegado para quedarse. Se estima que esta aceleración supuso un avance vertiginoso de 5 años en las previsiones de volumen de negocio. El canal online ganó 2,7 millones de clientes y la penetración actualmente alcanza el 43,4% de la población residente en el país, según datos del Informe de la Moda Online en España. El rápido desarrollo de la oferta, la creciente confianza de los clientes en los sistemas de pago y el auge de los dispositivos móviles, también han contribuido a que la venta online sea el foco en el que se ha volcado futuro de las empresas.
La falta de demanda durante el confinamiento produjo grandes acumulaciones de stock. Según los datos del informe elaborado por la consultora McKinsey, la industria inició el 2021 con un 25% de su inventario sin vender cuyo valor económico estaba entre 140.000 y 160.000 millones de euros a nivel mundial. Este hecho ha propiciado cambios estructurales dentro del sector que busca nuevas fórmulas que le permitan establecer una producción más cercana, suministros más flexibles, colecciones más cortas, más básicas y menos sujetas a las temporadas.
Múltiples marcas y compañías han empezado o anunciado su plan de reconversión propiciado por el auge del canal online y las consecuencias de la crisis sanitaria. Estos planes incluyen en algunos casos el cierre de tiendas físicas y la reconversión de muchos de estos puntos en showrooms interactivos, mucho más vinculados al comercio electrónico. Según ID Logistics, uno de los principales operadores en contract logistics a nivel internacional, el sector textil se encuentra ahora con otra importante piedra en su camino para recuperar los niveles de ventas y rentabilidades previas a la pandemia.
La crisis logística y de suministro de productos procedentes de Asia, sobre todo de China, India y Pakistán están impactando con fuerza en el sector. Sólo las empresas que tenían márgenes más amplios de producción de proximidad han podido mantener sus previsiones de volúmenes de negocio, esto ha propiciado que algunas compañías tengan previsto en 2022 trasladar una parte de su producción a España o a países vecinos como Portugal o Marruecos, apostando por otros factores de valor añadido: más proximidad, gestión de proveedores locales, mejora en sus modelos de sostenibilidad y en muchos casos mayor calidad del producto.