De diseños de pasarela a batas de hospital: el sector textil reconvierte sus talleres de costura

El sector textil pasa de lo exclusivo a lo esencial. Los talleres de costura de grandes firmas como Carolina Herrera, Louis Vuitton o Hèrmes han cambiado los diseños de pasarelas por la confección de material sanitario, como batas o mascarillas. ¿El objetivo? Unir todos sus recursos para luchar contra la crisis del coronavirus.

La crisis del coronavirus golpea a la industria del lujo, una de las más afectadas después del sector turístico. Pero el cierre de las tiendas y una cascada de cancelaciones de las próximas pasarelas han obligado al sector textil a reinvertirse.

Una respuesta que nace de la petición de la Confederación de Empresas de la Moda de España, que se ha puesto en contacto con compañías del sector capaces reaccionar de forma rápida y segura a la elaboración de material sanitario.

De la pasarela a los centros sanitarios

La ultima en sumarse a la lista ha sido Carolina Herrera. La firma de alta costura, propiedad del grupo Puig, ha adaptado su línea de sastrería para confeccionar mascarillas y batas sanitarias, con el objetivo de dar respuesta a la alta demanda.

La marca de la diseñadora venezolana no solo elaborará material para el personal sanitario, sino que también confeccionará mascarillas para su utilización en la industria alimentaria imprescindible para garantizar el abastecimiento de los ciudadanos durante el confinamiento.

Otros diseñadores como Juan Avellaneda, Andrés Sardá o Dolores Cortes también han comenzado a confeccionar material sanitario en sus talleres de costura en colaboración con el Ministerio de Sanidad.

Empresas internacionales

La firma francesa Louis Vuitton no se ha quedado atrás y ha dedicado reabrir sus talleres de la capital francesa para producir batas de hospital que donaran al personal médico que trabaja en primera línea en la rede de los hospitales de Paris.

La firma de lujo cuenta con la colaboración de más de 300 artesanos que fabrican material sanitario en lugar de bolsos. Además, Louis Vuitton ha puesto en marcha sus fábricas de perfumes con el objetivo de dar respuesta a la alta demanda de gel desinfectante.

Por su parte, Hermès ha contribuido a la donación de 31.000 máscaras y 30 toneladas de desinfectante para manos. Otras firmas de la talla de Prada, Giorgio Armani o Versace también han querido ayudar en la lucha contra el coronavirus realizando donaciones destinadas a la investigación y compra de material.

Las marcas low-cost contra el coronavirus

Una iniciativa a la que no solo se ha sumado las grandes firmas de alta costura, sino también de moda low-cost. Concretamente, Mango confeccionará 13.000 batas de polietileno desechables destinadas a los equipos sanitarios para lo que han adquirido 30.000 metros de tejido homologado.

Para ello, la firma de moda ha transformado su proceso de creación de prendas habitual en un sistema de producción de batas a gran escala. Un proyecto en el que están trabajando más de 30 empleados desde el 8 de abril en las instalaciones de Barcelona.

Otras empresas del sector textil, como Inditex o El Corte Inglés también han cambiado la confección de ropa por la elaboración de material sanitario. El propio presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la ministra de Industria visitaron el taller donde la empresa que preside Marta Álvarez fabrica mascarillas.

Caída en picado de las ventas

Las ventas del sector textil se desplomaron más de un 70% en el pasado mes de marzo debido al cierre de las tiendas tras decretarse el estado de alarma, según los datos de la Asociación del Comercio Textil, Complementos y Piel (Acotex).

Unos datos que no mejoran en la venta por internet. La facturación online en el sector textil ha caído más de un 80%. «Los ciudadanos no están con ánimo de comprar ropa que no saben cuándo se van a poder poner», señalan desde Acotex.