Choque entre Sánchez y los organizadores del Mobile: niegan los «motivos ocultos» que esgrime Moncloa
"No hay nada contra Barcelona o España, es un problema internacional de salud. Queríamos mitigar el riesgo de celebrar el evento ante un evento global de esta magnitud", han dicho los representantes del Mobile World Congress, que de esta forma contradicen al Ejecutivo que ha negado que la cancelación tenga nada que ver con el coronavirus.
El choque entre el Gobierno de España y la organizadora del Mobile World Congress, la GSMA, queda al descubierto apenas 24 horas después de certificarse la cancelación del MWC 2020, que se dio a conocer este miércoles. Después de la suspensión, que parecía inevitable en las últimas jornadas, la organizadora del Mobile y el Ejecutivo se enfrentan directamente sobre los motivos de este fracaso, dejando una imagen de enfrentamiento entre el Ejecutivo y el organizador de la feria de tecnología móvil más importante del mundo.
El Gobierno de Pedro Sánchez mantiene desde esta mañana en sus declaraciones públicas la estrategia de decir que la cancelación del Mobile World Congress «no se debe al coronavirus». Lo ha dicho este jueves por la mañana la vicepresidenta Carmen Calvo y lo ha dicho después la ministra de Industria, Turismo y Comercio, Reyes Maroto, quien además ha señalado a las empresas para que digan los motivos reales, según ella, de su cancelación.
«No hay ningún problema oculto. Es un tema sanitario», ha dicho la GSMA contradiciendo a Moncloa
Esta teoría del Ejecutivo se enfrenta de forma frontal con lo que ha declarado el CEO de GSMA, John Hoffman, de forma oficial en rueda de prensa junto a Ada Colau y otras autoridades regionales catalanas: «No hay ningún problema oculto. Es un tema sanitario, la gente ha pensado en no viajar, en mantenerse en cuarentena por 40 días», ha indicado Hoffman.
«Situación de fuerza mayor»
Este periódico que adelantó en exclusiva mundial la primera de las salidas del MWC el pasado martes (LG Electronics), y también ha informado en primicia que el Ejecutivo de Pedro Sánchez se negaba a declarar la emergencia sanitaria, lo cual hubiera permitido anular el Mobile sin tener que hacer frente a indemnizaciones. Este hecho coloca en una situación muy compleja a GSMA, que probablemente tendrá que demandar a las aseguradoras para que hagan frente al coste de la cancelación.
Por el momento, la Fira de Barcelona dejará de facturar 70 millones de euros y no se sabe el destino de los 15 millones de aportación pública. La cancelación del MWC afecta a otros eventos más pequeños organizados por GSMA en Barcelona como ‘For Years From Now’ (4YFN).
La GSMA ha insistito en la «causa de fuerza mayor» que mitigue sus responsabilidades y ha insistido en que ha cancelado por el coronavirus. El Ejecutivo ahora deberá explicar cuáles son los motivos ajenos a la epidemia respiratoria.