El Comité de Disciplina de la Real Federación Española de Fútbol ha abierto expediente al Real Madrid tras la denuncia del Sevilla por los vídeos de Real Madrid Televisión. Un acto surrealista que ha dado a conocer el club andaluz a través de un comunicado oficial este jueves.
El club andaluz denunció a la cadena madridista por los vídeos que retransmiten en su canal cada semana contra los árbitros. Tras estudiar la denuncia, ahora, el Comité de Disciplina de la Federación le ha abierto un expediente al Real Madrid.
El Sevilla, en un comunicado más que surrealista, dice lo siguiente: «El club nervionense decidió actuar al entender que estas prácticas, que se han venido repitiendo en los últimos tiempos hacen un grave daño al fútbol español y ponen en tela de juicio la integridad de la propia competición y la honorabilidad del estamento arbitral pero, sobre todo, pretenden influir en los árbitros concretos que actúan en los partidos, ya que los vídeos tratan de crear la imagen de falta de profesionalidad y antimadridismo, justo antes de cada partido, con una enorme difusión a través de la televisión».
Una apertura de expediente surrealista que no concuerda con la libertad de expresión que ejerce Real Madrid Televisión con sus vídeos después de saber, todo el fútbol español, que el Barcelona pagó al vicepresidente de los árbitros. A pesar de todo ello, el cuadro blanco sigue siendo gravemente perjudicado en esta Liga como ya pasó el pasado sábado en Mestalla con un escándalo inaudito perpetrado por Gil Manzano.
Comunicado del Sevilla
La Real Federación Española de Fútbol, a través de su Comité de Disciplina, ha notificado al Sevilla FC la apertura de expediente al Real Madrid tras la denuncia presentada por el Sevilla FC con motivo del vídeo emitido por Real Madrid TV sobre los colegiados Isidro Díaz de Mera y Pablo González Fuertes. Ambos árbitros fueron los elegidos para dirigir, en el campo y en el VAR respectivamente, el partido Real Madrid-Sevilla FC.
El club nervionense decidió actuar al entender que estas prácticas, que se han venido repitiendo en los últimos tiempos -incluido el partido de la primera vuelta entre ambos equipos-, hacen un grave daño al fútbol español y ponen en tela de juicio la integridad de la propia competición y la honorabilidad del estamento arbitral pero, sobre todo, pretenden influir en los árbitros concretos que actúan en los partidos, ya que los vídeos tratan de crear la imagen de falta de profesionalidad y antimadridismo, justo antes de cada partido, con una enorme difusión a través de la televisión. Esto tiene especial repercusión en los partidos que se juegan en el Santiago Bermabéu, ya que las decenas de miles de aficionados del Madrid llegan aleccionados de la existencia de un sesgo de parcialidad antimadridista en los colegiados que van a intervenir, lo que incrementa la tensión y crea una presión injusta sobre ellos.
