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Bautista cayó ante Tsitsipas y España se retiró del dobles

Carreño cumple ante Pervolarakis y mete a España en semifinales de la ATP Cup

Pablo Carreño superó (6-3, 6-4) a Michail Pervolarakis, número dos de Grecia, y mete a España en semifinales de la ATP Cup. El número dos español volvió a abrir pista con éxito y superó a su rival, semidesconocido, en un partido trampa

  • Nacho Atanes
  • Redactor de deportes y canterano de OKDIARIO. Desde 2016 cubriendo la información de tenis. También baloncesto, fútbol, ciclismo y otros contenidos.

España está en semifinales de la ATP Cup. Sin necesidad de acudir a la presencia de su gran líder, Rafael Nadal, ni tan siquiera al segundo partido de la segunda eliminatoria, el combinado nacional firmó su pase a la vez que Pablo Carreño levantaba los brazos en su duelo ante el modesto Michail Pervolarakis, número dos de Grecia. El número tres español, ascendido al dos por las molestias de Rafa, supo manejar un partido en el que era eminentemente superior, y firmar el punto clave (6-3, 6-4) para que, pase lo que pase con Bautista y el dobles, España siga en competición en las eliminatorias que decidirán al campeón. Italia espera en semis. 

Pasada la tensión provocada por el positivo de un trabajador del Hotel Hyatt, los jugadores españoles regresaban a las pistas de Melbourne Park para seguir con su andadura en la ATP Cup. De nuevo sin Nadal, la responsabilidad de abrir fuego era de Pablo Carreño, en este caso con un partido teóricamente asequible ante Pervolarakis, número 426 del ranking. Espigado y con potencia en sus golpes de fondo, el grecochipriota no debía ser rival para un Carreño motivado después de su doblete –triunfo ante Millman y en el dobles– frente a Australia.

Pablo sabía que no podía dudar y las primeras ventajas en el partido fueron suyas. Siempre sólido desde el fondo, el gijonés no acusó el cambio de turno ni el teórico tanteo inicial, en el que la presión iba a estar de su lado. Precisión milimétrica y agresividad al resto eran puntos a no evitar dentro de la receta de Carreño, que en un abrir y cerrar de ojos se colocaba con dos breaks de ventaja y preparado para cerrar el set inaugural.

El partido volaba en su duración, debido a la fragilidad de Pervolarakis en intercambios de más de cinco golpes, siempre frente a uno de los muros del ranking. Carreño, sin embargo, se durmió en los laureles del dominio y su rival lo iba a aprovechar para sumar su primer juego al saque, siempre de alivio, y más tarde romper el de Pablo hasta colocar un 5-2 que sería 5-3 segundos después, con un juego en el que el español no pudo poner una pelota en juego.

Raro en Pablo, pero todo controlado ya que, con su saque de nuevo como aliado, iba a sumar sin fisuras el juego que le restaba para cerrar la primera manga, antes de comenzar la segunda con un break demostrativo de la superioridad del tenista español sobre la pista. España estaba a un set de las semifinales y Bautista ya esperaba en el vestuario, preparándose para su duelo ante el maestro Tsitsipas.

Carreño cierra sin fisuras

La inercia desarrollada por Carreño en el necesario arreón para desbloquear el primer set había servido para despegar en el segundo, en el que Pervolarakis también iba a dar qué hablar. Perdió su saque de primeras el griego, pero desde entonces, su empeño en mantenerse en el partido le sirvió para, aunque a contracorriente, mantener opciones de igualar la contienda.

Con un servicio mejorado notablemente en comparación con el inicio, Pervolarakis pudo sumar sus juegos y forzar a todo un número 16 del ranking a hacer lo propio con los suyos para cerrar el partido. Fue entonces cuando la solidez de Pablo fue puesta verdaderamente a prueba y, el resultado, como podía esperarse, fue positivo para sus intereses y los de España, que ya tiene los dos pies en semifinales, de nuevo con Carreño como actor principal, y con Italia como último escollo antes de la final de la ATP Cup. 

Bautista cae ante Tsitsipas

Ya con el pescado vendido en lo referente al pase de España a semifinales, Roberto Bautista y Stefanos Tsitsipas saltaban a pista para disputar un descafeinado segundo duelo de la eliminatoria que, eso sí, enfrentaba a dos de los mejores tenistas del planeta. La falta de competitividad por equipos no quitaba para que ambos pudieran sumar puntos ATP, importantes para el ranking, y la pelea se demostró desde el primer momento.

El partido era grande y ambos cerraron su servicio por pleno derecho durante más y más juegos del primer set, hasta llegar a la fase decisiva de este. Una vez ahí, la agresividad de Tsitsipas, un punto superior a la de Bautista, le daba el quiebre decisivo, permitiéndole apuntarse la primera manga por 7-5.

El campeón del Masters Finals 2019 era consciente de que su equipo, como podía preverse desde la selección del cartel, había caído ya eliminado, pero no quería privarse de una segunda victoria que sumar a la del miércoles con De Miñaur. Así las cosas, Stefanos continuó remando y de primeras iba a volver a quebrar el saque de Roberto, aturdido por el golpe que había significado perder el primer set, pero que no iba a bajar los brazos hasta el final.

Peleando siempre hasta la última bola, el castellonense demostró los galones de número uno de España salvando hasta tres pelotas de partido en el octavo juego, con su servicio, para en el siguiente romper a Tsitsipas y volver a igualar la contienda a cinco. Ahí, Bautista había dejado todas sus fuerzas y Stefanos, que supo tirar de veteranía pese a su espléndida juventud, repitió fórmula en el punto de inflexión del set para, con otro 7-5, poner punto y final a un partido que también fue el último de la eliminatoria, con la retirada del dobles español de un partido innecesario. Toca recuperar fuerzas para la semifinal con Italia.