El timo telefónico en el que están picando todos los padres: alerta si vives en esta zona de España
El objetivo es robar datos personales y bancarios de las víctimas
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El timo telefónico se han convertido en una de las principales modalidades de estafa en España. A medida que la tecnología avanza, también lo hacen las tácticas utilizadas por los ciberdelincuentes para engañar a las personas, hacerse con sus datos personales y bancarios y, en última instancia, robarles el dinero, e incluso suplantarles la identidad para cometer fraudes en su nombre. Ya sea a través de estafas telefónicas, correos electrónicos fraudulentos, o incluso mensajes de texto que aparentan ser de instituciones oficiales, las modalidades de son muy diversas y están en constante evolución para burlar los sistemas de seguridad.
Una de las formas más comunes de estafas telefónicas son las llamadas automáticas, conocidas como robollamadas. Este fraude se ha incrementado notablemente en los últimos años, gracias a la automatización de los sistemas de marcación. Las robollamadas son generadas por un software que marca cientos, si no miles, de números al azar, esperando que alguien conteste. En cuanto el receptor descuelga el teléfono y pronuncia una palabra, como «sí» o «hola», el sistema lo interpreta como un contacto válido y empieza a registrar esa información. La principal recomendación de las autoridades es muy clara: no responder a números desconocidos.
El timo telefónico del que advierten la autoridades
Una de las mayores preocupaciones con respecto a estas llamadas es que, aunque no siempre implican un robo inmediato de datos personas bancarios, las robollamadas son un medio utilizado para comprobar si el número está «activo». Esto abre la puerta a futuras llamadas comerciales, lo que puede ser muy molesto para los usuarios. En algunos casos, estos números desconocidos buscan que el receptor devuelva la llamada, lo cual puede generar cargos elevados en la factura, especialmente si la llamada proviene de un número internacional.
A menudo, el número de teléfono tiene un prefijo internacional que parece legítimo, lo que hace que el usuario no desconfíe. El riesgo aquí es que, al devolver la llamada, los usuarios pueden encontrarse con tarifas muy elevadas. La Policía Nacional ha advertido en varias ocasiones sobre este tipo de fraude, que ahora ha llegado a Galicia, subrayando que los delincuentes emplean máquinas automatizadas para marcar números al azar y establecer contacto con los usuarios.
Muchas veces, en cuanto se contesta, la llamada es transferida a un operador que intenta vender algún tipo de producto o servicio. Es en este momento cuando los delincuentes pueden comenzar a pedir información personal, como el número de cuenta bancaria o los detalles de una tarjeta de crédito. Además, en algunos casos, la grabación de una voz puede ser utilizada por los estafadores para autorizar compras.
SMS y correos electrónicos fraudulentos
Más allá de las estafas telefónicas, otro tipo de fraude muy común hoy en día son las estafas digitales, especialmente aquellas que se llevan a cabo a través de mensajes de texto y correos electrónicos. Los ciberdelincuentes a menudo suplantan la identidad de instituciones oficiales, como la Agencia Tributaria o la Seguridad Social, para engañar a los usuarios y hacer que proporcionen información sensible.
Recientemente, un ejemplo de este tipo de fraude ha sido la estafa relacionada con la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet). Durante los días de crisis por la DANA en varias comunidades autónomas, los delincuentes se hicieron pasar por Aemet y enviaron SMS con enlaces falsos, buscando robar los datos de los usuarios. La Aemet, como subrayó la institución en sus canales oficiales, nunca emite alertas meteorológicas por medio de SMS. Este fraude sólo tiene como objetivo aprovechar situaciones de alarma o emergencia para crear un ambiente de urgencia y conseguir que el usuario haga clic en el enlace, lo que puede llevar a la instalación de malware o el robo de datos personales.
En una situación similar, en el mes de agosto, los delincuentes se hicieron pasar por la Dirección General de Tráfico (DGT) enviando mensajes que informaban de multas de tráfico pendientes. Al acceder al enlace proporcionado en el mensaje, los usuarios eran dirigidos a una página falsa que les pedía que ingresaran sus datos personales y bancarios para «pagar la multa». En realidad, todo formaba parte de una estafa para obtener información bancaria de los usuarios.
En definitiva, el timo telefónico que está afectando a numerosos padres en diversas zonas de España es una clara muestra de la ingenio de los ciberdelincuentes y de lo importante que es mantenerse alerta. Este tipo de fraude, que aprovecha la confianza de los mayores al hacerse pasar por instituciones conocidas, puede tener consecuencias graves si no se tiene cuidado.
Nunca se deben compartir datos personales o bancarios por teléfono y siempre es mejor cortar cualquier comunicación sospechosa y contactar directamente con las autoridades o entidades implicadas. Además, inscribirse en la Lista Robinson y activar bloqueos para llamadas comerciales son medidas eficaces para reducir el riesgo de ser víctima de estas estafas que son cada vez más habituales.