Comunidad Valenciana
RECURSO A LA FALTA DE ELEMENTOS DE PROTECCIÓN EN LA PRIMERA OLA DE LA PANDEMIA

La Sanidad de Puig dice ahora que no faltaba material pero que tomó medidas para evitar sustracciones

La Consejería de Sanidad valenciana, que ahora dirige Miguel Mínguez en el Gobierno que preside el socialista Ximo Puig ha vuelto a enervar a los médicos. El nuevo enfado de los facultativos está motivado por el recurso presentado por la citada Consejería contra la sentencia que obliga a indemnizar a en torno a 100 facultativos por la falta de elementos de protección en la primera ola de la pandemia en Valencia. La Consejería sostiene que no se trataba de que faltasen equipos sino de que se tomaron medidas para evitar la sustracción de los mismos y que se insistió en que se hiciese un uso racional de esos equipos. El sindicato médico CESM-CV estudian presentar una demanda por una presunta vulneración del derecho al honor de sus asociados.

El pasado noviembre, un Jugado de Alicante condenó a la Consejería de Sanidad valenciana al pago de indemnizaciones por la falta de elementos de protección durante la primera ola de la pandemia. La sentencia respondía a una demanda previa del Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana (CESM-CV) que consideraba que la Consejería entonces dirigida por la hoy portavoz socialista en las Cortes Valencianas Ana Barceló había incumplido sus obligaciones de proporcionar elementos de protección a los médicos en esa primera ola.

A esa primera sentencia de Alicante siguieron otras 2. Una, en Benidorm. La otra, la del Jugado de lo Social Número 10 de la ciudad de Valencia. Esta última, según publicó en su día OKDIARIO condenaba a la Consejería de Sanidad valenciana a indemnizar a cada uno de los 100 médicos demandantes con 4.500 euros. Fue esta última sentencia, la que dio origen a la famosa valoración del presidente del citado sindicato, Víctor Pedrera: «Si fuera un partido de fútbol, diríamos que Médicos, 3 – Puig, 0».

Pero Ximo Puig decidió recurrir esas sentencias. Sobre el primero de esos recursos, el de Alicante, resolverá el Tribunal Superior de Justicia de la Comunidad Valenciana (TSJCV) el próximo 5 de julio. Ese recurso de la Generalitat Valenciana es el que enervó exponencialmente los ánimos de los médicos porque sostenía en su descargo que «la circunstancia de poner bajo llave el material obedecía a que se estaba sustrayendo el mismo ante el pánico que cundía entre el personal sanitario por la pandemia que se avecinaba».

Ahora, en un larguísimo escrito de recurso de suplicación, la Consejería de Sanidad sostiene en referencia a la sentencia de Valencia y en cuanto a los equipos de protección individual, que no faltaban dichos equipos sino que se adoptaron medidas para evitar la sustracción de ese material y se insistió en que se llevase a cabo un uso racional del mismo. 

Pero, además, hay otra cuestión que enerva a los médicos, por cuanto la Consejería considera en su recurso que desde marzo de 2020, los médicos «al igual que toda la población» estuvieron expuestos al riesgo de contagio. El enfado de los médicos viene porque consideran que ellos no se encontraban al igual que el resto de población confinados en su casa, sino en primera línea atendiendo los casos que ese les presentaban. Todo ello, según siempre fuentes próximas al caso.

Por todo ello, el Sindicato Médico de la Comunidad Valenciana CESM-CV considera que han vuelto a ser «insultados» y que se está excusando «la incompetencia de la Consejería en una supuesta sustracción de material por los profesionales».

El Sindicato, además, que ha felicitado al nuevo consejero Miguel Mínguez por su nombramiento como nuevo consejero de Sanidad valenciano, ha solicitado también una entrevista con Mínguez. Y uno de los puntos que quieren tratar con él es la retirada de los citados recursos y que marque «un nuevo talante» que acabe con lo que consideran «continuo ataque y menosprecio» de la Consejería a sus médicos.

Además, sostienen que sus servicios jurídicos están valorando la presentación de una demanda colectiva de protección del derecho al honor porque tanto en el recurso contra la sentencia de Alicante, como ahora en el de Valencia puede existir una presunta vulneración de ese derecho.

CESM-CV cuenta con cerca de 5.000 afiliados en el territorio valenciano, según fuentes del citado sindicato y está siendo uno de los más beligerantes tanto en lo concerniente a la falta de elementos de protección en la primera ola como en otro apartado importante: el del plan de acción de la Atención Primaria presentado por la entonces consejera Ana Barceló y que también cuestionaron. En este caso, porque creían que no daba respuesta adecuada a la saturación se producía en la atención en centros de salud. A su juicio, hacen falta 800 nuevos médicos para paliar las deficiencias que presenta el sistema.