El sarampión es perjudicial: desmintiendo supuestos beneficios a largo plazo
El sarampión es una enfermedad peligrosa que no debe ser subestimada. Los supuestos beneficios a largo plazo de la infección son, en realidad, mitos.
Aumento de brotes de sarampión
Cómo bloquear la infección por sarampión
Piden vacunaciones masivas contra el sarampión
Un continente perdido: los científicos no dan crédito tras descubrir una isla que ha emergido del océano
Reconstruyen el rostro de una mujer que vivió en Grecia antes de la guerra de Troya: "Me dejó sin aliento"


El sarampión es una enfermedad vírica muy contagiosa que afecta sobre todo a niños pequeños. Antes de que se desarrollara su vacuna en 1980, el sarampión provocó la muerte de 2,6 millones de personas al año en todo el mundo. Actualmente se puede prevenir mediante la vacunación, pero las complicaciones asociadas a la infección siguen siendo una de las primeras causas de muerte infantil a nivel mundial según la Organización Panamericana de la Salud OPS/OMS.
Recientemente, ha surgido un nuevo debate en redes sociales y varios círculos pseudocientíficos sobre los supuestos beneficios del sarampión. De acuerdo a algunos sectores, el virus del sarampión podría fortalecer el sistema inmunológico y reducir el riesgo de enfermedades como el cáncer, una idea con muy poco respaldo que el secretario de Salud de EE.UU. Robert F. Kennedy Jr. ha repetido.
La evidencia científica ha desmentido estas afirmaciones, advirtiendo las complicaciones graves que puede provocar la enfermedad.
La falsa idea de «beneficios» inmunológicos
Una de las afirmaciones más comunes que se han escuchado en los últimos años es que la infección por sarampión puede «limpiar» el sistema inmunológico y proporcionar un tipo de «reinicio» que podría hacer que el cuerpo sea más resistente a otras enfermedades. Esta idea se basa en la noción de que la exposición a una infección podria fortalecer el sistema inmunológico. Sin embargo, esta percepción está profundamente errónea.
Los orígenes del mito sobre los beneficios del sarampión
Las teorías sobre los supuestos beneficios del sarampión comenzaron hace décadas atrás, cuando algunos sectores relacionados con la salud argumentaron que contraer enfermedades infecciosas en la niñez puede ser beneficioso en el transcurso de la vida, ya que ayuda a fortalecer la inmunidad natural del organismo.
En los últimos años, el debate ha resurgido nuevamente en redes sociales, donde usuarios de diversos sectores aseguran que la infección por sarampión es beneficioso para salud a largo plazo, sin mencionar los daños documentados que provoca. Esto ocurre mientras los casos de infección por sarampión siguen aumentando desde el mes de enero en Texas, estado donde hay bajas tasas de vacunación.
No obstante, no existen pruebas científicas de que una infección por sarampión proporcione protección contra diversas enfermedades crónicas en la adultez. Al respecto, el Dr. Michael Mina, exprofesor de la Escuela de Salud Pública de Harvard, asegura que “no hay buenos datos que demuestren que el sarampión mejora la salud” y que la comunidad científica “ha demostrado precisamente lo contrario”.
El sarampión daña el sistema inmunológico
El sarampión puede provocar muchos problemas de salud, incluyendo diarrea, intensa, infecciones de oído, ceguera, neumonía y encefalitis (inflamación del cerebro), los cuales pueden ocasionar la muerte.
Los estudios más recientes demuestran que la infección por el virus del sarampión, provoca un fenómeno conocido como “amnesia inmunológica” que disminuye la capacidad del cuerpo para recordar infecciones pasadas y combatir otras enfermedades. Este fenómeno inmunológico hace que las personas que contrajeron el sarampión sean vulnerables a infecciones contra las que anteriormente habrían estado protegidos.
Una de las investigaciones más citadas con respecto a esto, publicada en la revista Science en 2019, reveló que el virus puede destruir entre el 11% y el 73% de los anticuerpos preexistentes en una persona, debilitando significativamente su sistema inmunológico durante años. Según este y otros estudios, el efecto puede durar hasta cinco años después de la infección de sarampión, mientras las personas readquieren lentamente la inmunidad que perdieron.
Este hallazgo no sólo desmiente la idea de que el virus del sarampión podría resultar beneficioso para la salud, sino que demuestra por qué la vacuna contra el sarampión ha reducido la mortalidad infantil general por enfermedades infecciosas en un 50% más que la sola prevención de muertes por sarampión.
La hipótesis de la higiene
La mayoría de los estudios que relacionan el sarampión con menor riesgo de cáncer son preliminares y no han sido consistentes. Casi todos ellos se basan en la hipótesis de la higiene, la cual sostiene que los niños necesitan exponerse a microbios para entrenar al sistema inmunológico sobre cómo responder.
No obstante, los expertos aseguran que tanto niños como adultos se exponen e infectan con agentes que impulsan esas mismas respuestas todo el tiempo. Por tanto, no se trata sólo del virus del sarampión. En todo caso, las personas vacunadas seguirían recibiendo esa exposición, ya que la vacuna contra el sarampión es una forma debilitada del virus.
De hecho, es debido a la capacidad única del sarampión para dañar el sistema inmunológico, que existe la posibilidad de que pueda eliminar células que causan cáncer o enfermedades autoinmunes. Existen casos raros documentados al respecto, pero son remotos. Además, incluso en esos casos, para los expertos el beneficio nunca superaría el riesgo de contraer sarampión.
Conclusión
La lucha contra el sarampión no solo es una cuestión de salud individual, sino también de responsabilidad colectiva. Al elegir la vacunación, no solo estás cuidando de ti mismo, sino también de aquellos que te rodean. La ciencia es clara: el sarampión es perjudicial, y la vacunación es la clave para su erradicación.
Lecturas recomendadas
Temas:
- Enfermedades