Consejos para la conservación del bosque

La conservación del bosque es responsabilidad de todos. Se dice con frecuencia que los bosques son los pulmones del planeta, y esta metáfora expresa una gran verdad. Contribuyen al equilibrio del oxígeno, del dióxido de carbono y de la humedad del aire necesario para la vida. Además, protegen los ríos, controlan la erosión, evitan derrumbes, regulan el clima  y son el hogar del 80% de las especies terrestres.  La lista de los beneficios de los bosques para la vida tal como la conocemos es muy extensa.

Pero vivimos tiempos en los que la explotación que el hombre hace de los recursos amenaza la existencia de los bosques. Año tras año, la tala indiscriminada reduce la población de árboles, y esto provoca efectos nefastos.

Por eso, es imprescindible que cada ciudadano de la Tierra enarbole la bandera de la conservación del bosque. Aunque no tenga un bosque cerca, cada persona puede realizar acciones puntuales que contribuyen a ese fin. Y cada pequeña acción suma.

¿Qué se puede hacer para contribuir a la conservación del bosque?

El primer paso es tomar conciencia de la importancia de los bosques. Es el punto de partida para mantener una actitud que favorezca su conservación. Cuando una persona se preocupa por la conservación del bosque, se compromete con esa noble causa.

Algunos consejos:

Difundir el mensaje de la necesidad de la conservación del bosque

Se trata de convencer a otros de que desde el día a día en el hogar o en el trabajo, se puede reducir la destrucción de los bosques.

Reducir el uso de papel y de madera

El papel y la madera son dos subproductos que se elaboran con árboles. Por tanto, aprovecharlos al máximo y evitar el uso indiscriminado de ambos elementos evita la tala de árboles.

Reciclar

El reciclaje es un factor favorecedor de la sostenibilidad de los recursos.  Consumir productos de papel o de cartón reciclados tiene un efecto protector de los bosques.

Comprar productos certificados FSC

El consejo de administración forestal otorga un sello que garantiza a los compradores que la madera procede de bosques protegidos.  El sello FSC demuestra la gestión sostenible de los bosques de los que procede la madera. Por lo tanto, para mantenerse en el camino de la conservación del bosque, es importante verificar la existencia del sello cuando se adquiere madera.

La deforestación es un mal que avanza a pasos agigantados. Desaparecen especies animales y vegetales, cambia el clima, el anhídrido carbónico envenena el aire. Es momento de tomar las riendas para mantener la salud del planeta. Y la conservación del bosque debe volverse una práctica constante en todo el mundo.

Te hemos presentado cuatro acciones simples con las que estarás contribuyendo a que los bosques, que son esenciales para la vida, se conserven. Ponte en acción. La conservación del bosque también es tu responsabilidad.