Actividades para estimular el desarrollo psicofísico de los bebés de los 0 a los 12 meses
Colocar cintas de colores para que jueguen con ellas o un pequeño espejo, son algunas de las actividades para estimular el desarrollo psicofísico de los bebés en su primer año de vida.
Cualquier bebé recién nacido necesita de una serie de estímulos que le ayuden en su desarrollo. A la alimentación y a procurarle un buen descanso le podemos sumar también el contacto, las emociones y las relaciones y también porqué no, distintas actividades como estas que os vamos a proponer para estimular el desarrollo psicofísico de los bebés de 0 a 12 meses.
El primer estímulo real que podemos ofrecer a un bebé recién nacido para estimular su desarrollo físico, cognitivo y emocional es sostenerlo en brazos, interactuar con él, hacerle sentir el contacto y con ello lograr que los bebés se desarrollen mejor siendo más fuertes, seguros y aunque no lo parezca, logrando en un futuro, un mejor rendimiento intelectual y físico. A ello, se le suman otras actividades que os explicamos y que acabarán de servirá a nuestro bebé para un buen desarrollo psicofísico durante sus primeros doce meses de vida.
Actividades para estimular el desarrollo psicofísico de los bebés de 0 a 12 meses
En el periodo que va desde los 0 a los 12 meses el bebé se fija en nosotros como si fueramos para él un espejo. Por ello, si somos capaces de proporcionar al niño una imagen positiva de sí mismo, lo estamos ayudando a construir una base segura sobre la cual basar su personalidad. Tenemos entonces que darle todo el amor del mundo y sobre todo estimular su amor hacia sí mismo. Si él ve que le queremos, se querrá a sí mismo y se convertirá en una persona con valores y felicidad.
Para el desarrollo del resto de sentidos a lo largo de sus primeros meses de vida, podemos además introducir actividades que se basen en:
- Cada estímulo correcto, a la edad adecuada: el principio básico del Método Montessori, es una garantía para estimular a los recién nacidos de la manera correcta, en lugar de frustrarlos;
- Respetar el umbral de atención de los niños: un recién nacido tendrá un umbral de atención muy bajo, de unos pocos minutos; un bebé de un año puede llegar a un tiempo de atención de entre 15-20 minutos;
- Sin sonidos, colores o ruidos fuertes: para el bebé recién nacido todo debe ser tranquilo, pacífico, relajado;
- Uso de materiales naturales, colores suaves: siempre tratemos de elegir materiales naturales, colores suaves, especialmente blanco y negro, materiales y juegos que se pueden lavar en la lavadora, suaves y especialmente diseñados para las primeras semanas de vida;
- Nunca le des a un recién nacido un juego que no se espera para su edad: la clasificación de edad en los juguetes no es un hábito, ¡sino una regla de seguridad! Por mucho que piense que tienes un niño ‘genio’, nunca le dé juegos que no estén destinados a él, antes que los demás, porque pueden contener partes que pueden inhalarse o dañar al niño.
Con las actividades que ahora te proponemos, lograrás el buen desarrollo del bebé, pero también podrás distraerle y hacer que se divierta en los momentos en los que no está comiendo o durmiendo.
Actividad para la coordinación de los ojos
Uno de los juegos más simples, pero más útil para desarrollar la coordinación de los ojos en un recién nacido, es hacer que estén disponibles cintas de raso de colores, para poder mirar, agarrar, tirar …
Parece increíble, pero atraen mucho a los niños: no solo por su color, sino precisamente por la posibilidad de ser agarradas y manipuladas. De esta manera, estimulan la coordinación mano-ojo y las llamadas habilidades motoras finas .
En el mercado puedes conseguir alfombras de juego para bebés que ya cuentan con este tipo de elementos, o puedes también coger un cojín y coser unas cuantas cintas o atar algunas a su cuna o parque y aprovechar para que las estire y juegue con ellas.
Observa al niño durante su actividad: a veces puede enojarse, sentirse frustrado porque no puede agarrar las cintas; Es precisamente a través de esta energía activa que el niño desarrolla la coordinación, a través de pruebas e intentos.
Actividad para el desarrollo de la vista
También con los ojos tiene que ver esta otra actividad, que servirá para estimular el desarrollo de la vista. Sabemos que los recién nacidos gradualmente refinan su sentido de la vista a lo largo de las semanas. En los primeros días de vida, los bebés tienen una visión bastante limitada y una predilección por las caras: siguen la cara de los padres, pero se enfocan a distancias muy pequeñas (alrededor de 15-20 centímetros).
Gradualmente, entre los 2 y 3 meses de vida, los niños comienzan a observar de una manera más intencional, buscando directamente la cara de los padres y comenzando a seguir sus movimientos.
Solo alrededor de los 9 meses es cuando los niños desarrollan la capacidad de observar objetos y comprender sus detalles.
Para estimular el sentido de la vista, los libros de tela suave, lavables a máquina, acompañados de figuras en blanco y negro son ideales . De hecho, los bebés se sienten atraídos por el contraste de luz y sombra, pero también por las figuras geométricas : espirales, círculos, formas simples, líneas y curvas. Estas mismas figuras en blanco y negro también son perfectas como carrusel para colocar en la cuna, en lugar de carruseles demasiado coloridos o ruidosos.
Actividad para desarrollar la percepción del yo
Uno de los elementos clave para que el niño se desarrolle de forma que tome conciencia de sí mismo es tener un espejo a mano. De hecho, el método Montessori ha demostrado que el uso del espejo sirve al niño tomar conciencia de su cuerpo y sus gestos, practicar movimientos, tomando como decimos, conciencia de sí mismo.
Obviamente, el espejo debe ser seguro y estar al alcance de un niño: no debe ponerlo en peligro, no debe ser capaz de cortarlo rompiéndose o haciendo que se parta en varios pedazos.
Actividad para desarrollar su fuerza
Muchos niños se quedan en la cuna o en el parque todo el tiempo, pero esto no les ayuda a ganar fuerza muscular y a menudo retrasa la capacidad de sentarse, darse la vuelta en la cuna, o de hecho, tomar el camino del destete.
Llevar a los niños en el portabebés , o dejarlos unos 30 minutos al día boca abajo sobre una alfombra adecuada (a intervalos iniciales cortos de 2-3 minutos), es muy útil para fortalecer sus músculos, en especial los de brazos y cuello.
El tiempo boca abajo es uno de los momentos fundamentales para el desarrollo y fortalecimiento de los músculos de la cabeza, cuello, cuello y hombros del bebé, ayuda a evitar la plagiocefalia o el aplanamiento de ciertas partes de la cabeza, debido a la elasticidad del cráneo. Pero el tiempo boca abajo también ayuda a fortalecer los músculos de las piernas, de modo que el niño aprende a desarrollar habilidades motoras como rodar y aprende a alcanzar y agarrar sus juegos favoritos, apalancar las piernas y al final aprender a gatear bien. Todo ello, evidentemente, estando nosotros cerca para supervisar que el bebé esté bien y no se pueda hacer daño o golpear mientras se encuentra boca abajo.
Con las actividades mencionadas que son además realmente sencillas de aplicar, lograrás grandes desarrollos psicofísicos para el bebé e incluso estimularás a que el pequeño tenga ganas de realizar más y más cosas a medida que va cumpliendo meses.
Temas:
- Cuidados del bebé