6 consejos para que tu hijo empiece a vestirse solo
Tu hijo tiene ya dos años y si consideras que ha llegado el momento no sólo de que ya no lleve pañal, sino también de que empiece a aprender a vestirse solo, está claro que has tomado una decisión muy acertada porque a esta edad es el momento idóneo de que empiece a ser autónomo e independiente en ciertos aspectos. En el caso de la ropa, debes seguir una serie de consejos muy útiles que permitirán que consigas tu propósito en breve periodo de tiempo.
Grandes dosis de paciencia
Ante todo, es fundamental que tengas mucha paciencia. No puedes pretender que de un día para otro tu pequeño ya sea capaz de vestirse por sí solo. Así que relájate, no te alteres enseguida y estate calmado. Y es que si te enfadas o gritas, lo que harás será todo lo contrario a lo que pretendes: que tu pequeño se sienta frustrado.
Plantea la situación como si de un juego se tratase
Lo primero que tienes hacer para conseguir comenzar a que se vista solo es plantear ese reto como un juego. Así, si lo desarrollas mediante una canción, por ejemplo, tu hijo sentirá esa actividad como algo divertido y eso le motivará a llevarla a cabo.
Elecciones en cuanto a la ropa
A la hora de lograr que el niño empiece a vestirse por sí mismo es fundamental el papel que juega la ropa:
- Lo primero que debes hacer es ofrecerle cada día la posibilidad de que elija el vestuario que quiere llevar. Para que no se decante por ir disfrazado, dale varias opciones. Así, esa pequeña capacidad de decisión que le das la verá como algo muy positivo y se animará a querer vestirse solo.
- De la misma manera, es fundamental que, en un primer momento, le facilites la tarea que nos ocupa. Por eso, apuesta por ropa que cuente con sistemas de cierre sencillos como el velcro o las cremalleras.
Rutina
Al igual que es necesaria para que duerma y descanse mejor, también es necesario que para vestirse solo tu hijo tenga a diario una rutina. Con esto nos referimos a que cada mañana llevéis a cabo los mismos pasos y en el mismo orden, como pueden ser lavarse la cara, desayunar y luego vestirse.
Ejemplo paternal
Como en otros muchos aspectos, el niño se suele comportar por imitación. Así, hace lo mismo que llevan a cabo sus padres. Por eso, para conseguir que tenga autonomía a la hora de cambiarse de ropa, es recomendable que, por lo menos al principio, lo hagáis juntos. De esta manera, al verte a ti, se animará a seguir tus pasos.
Entrenamiento
Hay ciertas prendas de ropa que le puede costar ponerlas. Por eso, es aconsejable que no dudéis en practicar, mediante juegos, las que resultan más complicadas. Así, a diario, a través de canciones por ejemplo, podéis ensayar sobre cómo atarse los cordones o cómo ponerse las medias. De esta manera, aprenderá a colocárselas sin apenas darse cuenta, pues lo hará divirtiéndose.