Tebas se decanta por el Athletic e indigna al mallorquismo
"A ver si sacan la gabarra", dice a su llegada a Sevilla
"Ya tiene ganas la afición española de ver al Athletic"
"Tengo 61 años y he visto pocas veces la gabarra, me apetece volver a verla"
Javier Tebas ha rebasado hoy todos los límites. El presidente de la Liga de Fútbol Profesional, del que se supone neutralidad con todos los equipos, ha hecho unas declaraciones a su llegada a Sevilla a los compañeros de El Correo en las que claramente se decanta por el Athletic. La indignación entre el mallorquinismo es absoluta. Sobre todo teniendo en cuenta que Tebas fue en el pasado abogado del Mallorca y llegó a comprar parte de su paquete de acciones a través de su sociedad Esfinge, que luego vendería obteniendo un sustancioso beneficio.
«Vamos a ver si el Athletic vuelve a sacar la gabarra después de tantos años. Yo creo que ya tiene ganas la afición española de ver al Athletic», comenzó diciendo Tebas, que se frenó en plena incontinencia verbal y no acabó la segunda frase, en la que se manifestaba favorable a que el equipo bilbaíno se proclamara campeón.
Dándose cuenta de su error, su tono fue atemperándose -«el Mallorca es un duro rival. Está todo abierto para todo el mundo, vamos a ver»-, pero no tardó en volver a tomar partido: «Es importante este ambiente para seguir teniendo al Athletic arriba, Está haciendo una gran temporada, su juego es uno de los más vistosos de la Liga».
Más tarde, preguntado de nuevo sobre la gabarra, dijo que «es historia del fútbol español. Tengo 61 años y la he visto pocas veces, por lo tanto me apetece verla también», en una frase que el mallorquinismo, a través de las redes sociales, no deja de censurarle.
Tratando de salir del jardín en el que se había metido, el presidente de la Liga acabó mandando un mensaje políticamente correcto: «Voy con los dos equipos. No me atrevo a dar un pronóstico, pero lo que sí creo es que va a haber prórroga».
Javier Tebas fue en el pasado representante del Mallorca en la Liga de Fútbol Profesional pese a que no tenía ninguna vinculación oficial con el club. Más adelante compró un porcentaje de las acciones que estaban en poder de Mateu Alemany y, cuando Serra Ferrer accedió a la propiedad, representó al Mallorca ante la UEFA para defenderle de la denuncia del Villarreal que, en 2010, dejó al equipo sin participar en competiciones europeas. Lo último que podía esperar la afición es que el presidente de la LFP se manifestara de forma tan descarada a favor del Athletic de Bilbao.