Un marine ebrio del portaaviones Gerald R. Ford la emprende a golpes con varios feriantes en Palma
OKBALEARES consigue las imágenes del momento de la agresión antes de la llegada de la policía


La capital balear ha vivido una noche de tensión y golpes tras el violento altercado protagonizado por un marine estadounidense, miembro de la tripulación del portaaviones nuclear Gerald R. Ford, el más grande y moderno del mundo. El militar, visiblemente ebrio, irrumpió en el Parc de la Mar, junto al paseo marítimo, donde se celebraba una feria local. Según varios testigos, el soldado «entró buscando pelea, completamente borracho y fuera de sí».
Las imágenes exclusivas obtenidas por OKBALEARES muestran una escena de auténtico caos: varios feriantes se enzarzaron a golpes con el fornido marine, que resiste los impactos pese a tambalearse por la ingesta de alcohol. En un momento de la pelea, el soldado cae al suelo, pero vuelve a levantarse entre insultos y empujones antes de abandonar la zona a duras penas.
El USS Gerald R. Ford (CVN-78) recibe este nombre en honor al 38º presidente de los Estados Unidos, cuenta con una gran capacidad militar y es el más poderoso de la flota de la marina del país presidido por Donald Trump. Este coloso, de 337 metros de eslora, tiene 4.500 militares a bordo y transporta 90 aeronaves y tecnología de vanguardia, y su entrada en el Mediterráneo se produce en un momento geopolítico complicado y de máxima inestabilidad.
Los partidos de la izquierda balear aprovecharon su presencia para convocar una protesta en el Paseo Marítimo a la que sólo acudieron una docena de activistas. La concentración, convocada por la plataforma Mallorca per la Pau y a la que se han adhirieron otras entidades, quedó reducida a su mínima expresión y los asistentes corearon gritos de Mallorca no es base militar, fuera barcos de guerra y OTAN no, Mallorca es tierra de paz.
La ex ministra de Igualdad y actual eurodiputada de Podemos, Irene Montero, también expresó su conformidad con la llegada del portaaviones nuclear de Estados Unidos a Mallorca.
Montero exigió al Gobierno de España que preside Pedro Sánchez que no autorizara la llegada de este barco norteamericano ya que «evidencia la complicidad de Estados Unidos con el genocidio que se está cometiendo en Palestina y su voluntad de demostrar que también manda en Europa».
«Al mismo tiempo que apoya el genocidio y presenta junto a Netanyahu un plan de dominación colonial de Palestina, EEUU muestra con este portaviones que también manda en Europa», afirmó la eurodiputada.