Proyecto de modernización de AENA

Luz verde a la remodelación del aeropuerto de Palma

Las obras deberán estar terminadas en 2026 y contemplan la instalación de placas fotovoltaicas en el propio aeródromo

El objetivo de AENA es modernizar los edificios y garantizar la sostenibilidad ambiental del espacio

El Gobierno remodelará el aeropuerto de Palma pero no lo ampliará

detenido vuelo
Varios aviones en una de las pistas del aeropuerto de Palma. Foto: Isaac Buj / Europa Press.

El edificio terminal del aeropuerto de Son Sant Joan de Palma se construyó en 1997 y desde entonces, se han acometido obras de mejora y mantenimiento, pero no una remodelación integral. El objetivo de AENA es modernizar una infraestructura con 25 años de antigüedad y «garantizar su sostenibilidad ambiental». Las obras deberán estar terminadas en 2026 y no se contempla la ampliación del aeródromo en estos cinco años. La inversión total será de 559 millones de euros.

AENA ha recibido la autorización para iniciar la remodelación tras emitir el Ministerio de Transición Ecológica y Reto Demográfico su resolución favorable a la Declaración de Impacto Ambiental del proyecto. Una vez aprobado el Documento de Regulación Aeroportuaria (DORA II) por parte del Gobierno y este era el última paso necesario. Dicha resolución incluye los compromisos acordados entre AENA y la Comisión balear de Medio Ambiente para estas inversiones. La remodelación del aeropuerto de Palma constará de cuatro actuaciones: plataforma de estacionamientos en remoto, edificio procesador y módulo A, módulo D y viabilidad, accesos y aparcamientos.

La empresa pública ha explicado que se reordenará el espacio existente «de un modo más racional, pero sin ampliar el espacio actual». Precisamente, la resolución sobre el impacto ambiental recoge el compromiso de AENA de no incrementar la capacidad del aeropuerto, que se mantendrá en 66 operaciones por hora. Además, de esta reordenación, adaptarán la infraestructura a la normativa europea de seguridad. «Se agrandará la sala del sistema automatizado de tratamiento de equipajes, para instalar las nuevas máquinas, que son más grandes».

Puesto que el proyecto contempla «la sostenibilidad ambiental del aeropuerto», el aumento de energía que derive del proyecto debe provenir de fuentes renovables de autoconsumo. Así, AENA tiene prevista la instalación de placas solares en las cubiertas en las que sea posible, siempre y cuando la infraestructura «se instale en el propio aeródromo». La empresa ha propuesto utilizar el espacio del parking y próximamente licitarán el proyecto de instalación.

Sin parque fotovoltaico en Son Bonet

Cabe destacar que la resolución del Ministerio especifica que las placas solares de autoconsumo deben instalarse en el propio aeródromo y no en zonas naturales. De esta forma, el Gobierno ha rechazado el proyecto de AENA de crear un parque fotovoltaico en Son Bonet. Así, la remodelación del aeropuerto de Palma no podrá contar con el que iba a ser uno de sus principales apoyos en lo que a generación de energía renovable se refiere. Una decisión que la plataforma ecologista Son Bonet Pulmó Verd ha celebrado.

A pesar de que el citado parque fotovoltaico se iba a construir en el aeródromo que de Marratxí y que iba a ser de autoconsumo, dicha plataforma se ha opuesto desde el minuto uno. Han asegurado que AENA tiene «espacio más que suficiente junto a los hangares de Son Bonet para instalar placas solares». Sin embargo, han criticado la posibilidad de que la empresa «plantee nuevas estrategias para intentar instalar un parque fotovoltaico». Según ellos, «ha actuado de forma artera otras veces». Así, la plataforma ecologista lo que quiere es que la zona verde del aeródromo de Son Bonet, gestionado por AENA, «sea en un espacio común para el pueblo».

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