El intenso calor y las críticas por la «precipitación» con los nuevos currículums marcan el inicio del curso escolar
Los sindicatos educativos han expresado este lunes la «insatisfacción» de los docentes en cuanto al arranque del curso escolar por la «precipitación» que ha supuesto la implantación de los nuevos currículums. Así lo ha explicado Stei Intersindical en declaraciones a Europa Press, señalando que para aplicar los currículos «se necesita formación adecuada y muchos no la han recibido o lo han hecho por su cuenta».
«Estamos insatisfechos por esta precipitación por parte del Ministerio, que ha obligado a las administraciones a poner en marcha los currículums ahora», han añadido desde Stei.
En la misma línea se ha expresado UGT Ensenyament, que ha criticado que el inicio escolar ha supuesto «la continuidad de situaciones angustiosas», con «estrés y presión a los docentes».
En este sentido, se han referido también a la implementación de los nuevos currículos, que se ha llevado a cabo de manera «precipitada», porque su aprobación en agosto «no ha dejado margen temporal para preparar adecuadamente el curso».
Además, el sindicato la ha tildado de «improvisada», porque la mayoría de los docentes no ha recibido ningún tipo de formación sobre cómo llevar a la práctica los cambios.
«Aspectos esenciales como la evaluación se han publicado dos días antes del inicio del curso, una evaluación que genera confusión y, si no se explica bien a las familias, generará conflictos y más estrés», ha lamentado UGT, que ha sentenciado también «la falta de fiabilidad que generan los trámites de adjudicación de plazas para el personal interino».
Por otro lado, los sindicatos han hecho referencia al Protocolo General de Altas Temperaturas excepcionales, que según UGT se puede resumir en «abrir ventanas, poner cortinas, beber agua y estar quietos para no sudar».
«Este protocolo del sentido común deja en evidencia las carencias que presentan las infraestructuras educativas para hacer frente a situaciones climatológicas adversas», han manifestado.
Sobre esto, desde Stei también han pedido la adaptación de los edificios al cambio climático, que es «obvio». «Les dicen que beban mucho agua y que no jueguen al sol, pero lo que hay que hacer es adecuar los edificios a la nueva realidad y pensar cómo modificarlos», han concluido.