Más de 17.000 firmas para cesar a la socialista que dejó repartir ‘pornoagendas’ a niños en San Fernando

La pornoagenda que se repartió en la Cabalgata de Reyes de San Fernando (Cádiz) ha puesto a más de 17.000 personas de acuerdo para pedir la dimisión de la máxima responsable de que eso ocurriera: Nerea León (PSOE), concejal de Fiestas e Infancia que dio el visto bueno al reparto a niños de aquella ignominia

Así, la campaña que exige a la alcaldesa socialista Patricia Cavada el cese de la concejal Nerea León (PSOE) llega a las 17.288 firmas y han sido presentadas en el Ayuntamiento por Pedro Mejías, coordinador general de acTÚa FAMILIA. Las familias afectadas pusieron en marcha, a través de una plataforma on line de firmas, una campaña que decía: «Pedimos la dimisión de Nerea León por repartir una pornoagenda en la cabalgata de Reyes». El texto de los más de 17.200 correos que Patricia Cavada ha recibido en su despacho de la alcaldía dice así: “El pasado 5 de enero, durante la cabalgata de Reyes, su Ayuntamiento, con el visto bueno de la concejala de Fiestas e Infancia, Nerea León, repartió 2.000 agendas con contenido para adultos entre los asistentes. Esas agendas llegaron a las manos de muchos niños que vieron un contenido inadecuado para su edad con frases como necesitas un buen polvazo o El sexo alarga la vida. Tengo las horas contadas».

Pedro Mejías ha señalado en declaraciones a OKDIARIO Andalucía que «hemos venido de nuevo aquí al ayuntamiento de San Fernando a presentar más de 17.200 firmas contra la concejal de las pornoagendas, para que sea cesada Nerea León, que fue la que permitió su distribución en la Cabalgata de Reyes. Más de 7.200 familias que han protestado ante esto y que quieren el cese inmediato de esta concejala. Aquí las tenemos y van a ser presentadas inmediatamente en el Ayuntamiento de San Fernando, Cádiz”.

Algunas de las frases más polémicas de estas pornoagendas son las siguientes: «Lo que tú necesitas es un buen polvazo», «Si el sexo alarga la vida, ¡tengo las horas contadas!», «Mandar a la mierda no es insultar, es una muy buena forma de ayudar a alguien a encontrar su camino», «quiero un hombre que me apoye en todo, en la mesa, en la cama, en la lavadora, en el coche, en la pared, absolutamente en todo» o «necesito un mensaje de ánimo y una cerveza (y follar también)».