El pueblo más frío del mundo: un lugar donde el termómetro se desploma a -71,2°C

Hay un pueblo en el que el termómetro se desploma por momentos, llegando a cifras nunca vistas. Ahora que estamos empezando a notar los efectos de un frío que puede ser clave, nos enfrentamos a una situación que acabará siendo la que marque la diferencia. El cambio climático se ha empezado a percibir, pero no solo con calor extremo, también con momentos de frío intenso que son igual o más peligrosos que el aumento de las temperaturas.

Mientras España se convierte en un horno ibérico cuando llega el verano, hay zonas del planeta que deben hacer frente a una situación muy distinta. Llega ese cambio de ciclo que puede acabar siendo lo que nos afecte de lleno en unos días en los que quizás hasta ahora no habíamos tenido en cuenta lo que acababa pasando en estos días. El calor puede ser un problema, pero también lo es el frío. Como curiosidad o quizás también para salir de la rutina y hacerte una foto con un termómetro en uno de los lugares más fríos del planeta donde vive gente, este pueblo está batiendo todos los récords.

Este pueblo es el más frío del mundo

El ser humano puede adaptarse a casi cualquier situación, luchando contra una serie de elementos que pueden acabar siendo los que marquen una diferencia importante en todos los sentidos. Habrá llegado el momento de empezar a preocuparse por el frío en España, un frío que nada tiene que ver con el de otras partes del planeta.

Si nos fijamos en las temperaturas de nuestro país, hay días de invierno que incluso podríamos salir de casa en manga corta, algo que es impensable en otras zonas del mundo. Rincones en los que el ser humano no ha dudado en poner su granito de arena, un lugar al que debemos empezar a acostumbrarnos.

Parece que, con el cambio climático a las puertas, cada vez más tendremos estos días en los que las temperaturas se dispararán por completo. Llegaremos a unas cifras que son especialmente peligrosas y que pueden poner en riesgo una vida que sigue extendiéndose por las zonas del planeta más alejadas.

En Turquía viven personas gracias a unas condiciones excepcionales en el que ha batido todos los récords, nada más y nada menos que más de 70 grados negativos en un invierno de pesadilla.

Este es el lugar en el que el termómetro se desploma llegando a -71,2ºC

 

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Los termómetros se han desplomado este invierno en un lugar del mundo que ha batido un récord, convirtiéndose en el pueblo que ha llegado a los -71,2ºC. Una cifra que pone los pelos de punta, en un invierno frío al que están acostumbrados los habitantes de este pueblo situado en Turquía.

Oymyakon es el lugar en el que el termómetro cae en picado. La suerte de estas personas es que viven cerca de una central Térmica que les proporciona energía para poder calentar sus casas. Sin esa calefacción sería imposible la vida, salir de casa es ya un reto más para poder seguir el ritmo de este pueblo que se ha convertido en uno de los más fríos del mundo.

Las redes sociales lo han convertido en viral y nos han ayudado a conocer un poco más este lugar tan singular: «Con temperaturas que alcanzan los 71,2 °C, el pueblo de Oymyakon, en la Siberia oriental de Rusia, se considera el asentamiento más frío del planeta. En la región donde viven aproximadamente 500 personas, el invierno dura nueve meses y la luz del sol sólo dura unas pocas horas al día. Los residentes disponen de calefacción gracias a la central eléctrica de carbón de la ciudad, pero también deben cerrar puertas y ventanas para compensar las pérdidas. Las tuberías también están frías, por lo que hay pequeñas casas fuera de la casa, con agujeros cultivados en la nieve, para cubrir sus necesidades. Los ciudadanos no suelen dedicar más de 20 minutos y, a menudo, tienen que hacer negocios al aire libre. Su alimentación se basa mayoritariamente en pescado, animales congelados como conejos o renos. En la Antártida se han registrado temperaturas aún más bajas (oficialmente la temperatura más baja es -91 °C cerca del macizo montañoso antártico)».

Como podemos ver es un tipo de pueblo singular al que, seguro que alguien querrá ir, si vemos estas temperaturas en invierno nos podemos asustar o sentir cierta curiosidad. Cada vez más descubrimos este tipo de desplazamientos que acabarán siendo los que nos acompañen en unos días para los que quizás no estamos del todo preparados.

Es la hora de ponerse a preparar la ropa de invierno, quizás pensando en una escapada a un pueblo frío, aunque seguramente no tanto como este, en el que se superan las temperaturas más frías de nuestro país con creces.