Recetas de cocina
Recetas de helados

Helado casero con solo 2 ingredientes: sin máquina y cremoso como el de heladería

¿Se pueden hacer en casa helados como los de una heladería? Aquí te dejamos una interesante receta de helado casero.

3 recetas de helados caseros

Helado casero de whisky

Helado veraniego de acederas

  • Francisco María
  • Colaboro en diferentes medios y diarios digitales, blogs temáticos, desarrollo de páginas Web, redacción de guías y manuales didácticos, textos promocionales, campañas publicitarias y de marketing, artículos de opinión, relatos y guiones, y proyectos empresariales de todo tipo que requieran de textos con un contenido de calidad, bien documentado y revisado, así como a la curación y depuración de textos. Estoy en permanente crecimiento personal y profesional, y abierto a nuevas colaboraciones.

¿Alguna vez has deseado disfrutar de un helado cremoso y delicioso en la comodidad de tu hogar, pero pensaste que hacer helado era complicado y requería de una máquina especial? ¡Te tenemos una excelente noticia! Con esta receta de helado casero, podrás disfrutar de un postre refrescante y delicioso utilizando solo dos ingredientes. Además, no necesitas una máquina para helados, y el resultado es tan cremoso que no podrás distinguirlo de uno comprado en la heladería.

¿Por qué hacer helado casero?

Hacer helado en casa tiene múltiples ventajas. En primer lugar, puedes controlar los ingredientes, lo que te permite hacer versiones más saludables y adaptadas a tus gustos. Además, es una actividad divertida que puedes compartir con amigos o familiares. Imagina las risas y la complicidad que surgen al mezclar y degustar tu propia creación.

Ingredientes

Preparación

  1. En un bol grande, vierte la nata para montar. Con una batidora eléctrica (o a mano, si te atreves), comienza a batir la nata a baja velocidad. Aumenta gradualmente la velocidad hasta obtener picos suaves. Esto suele tardar entre 5 y 7 minutos. Ten cuidado de no sobrebatir, ya que podrías convertir la nata en mantequilla.
  2. Añade la leche condensada o el sabor elegido a la nata montada. Utiliza una espátula de silicona para mezclar suavemente todo, haciendo movimientos envolventes. Esto es importante para mantener la aireación de la mezcla, lo que asegura que tu helado quede cremoso y ligero.
  3. Una vez que hayas mezclado bien la nata y el sabor, vierte la preparación en un recipiente apto para el congelador. Asegúrate de que el recipiente esté bien cerrado o cubierto con papel film para evitar que se formen cristales de hielo.
  4. Lleva el recipiente al congelador y deja que el helado se congele durante al menos 4 horas, aunque es mejor dejarlo toda la noche. Esto permitirá que el helado adquiera la textura perfecta.

Personalizaciones y Variaciones

Una de las maravillas de esta receta es su versatilidad. Puedes añadir diferentes sabores y texturas según tus preferencias:

Cómo Servir

Una vez que tu helado esté completamente congelado, retíralo del congelador y déjalo reposar a temperatura ambiente durante unos minutos antes de servir. Esto facilitará la tarea de sacar el helado. Puedes utilizar una cuchara de helado caliente para obtener bolas perfectas.

Información nutricional: 2420 kcal

Tipo de cocina: Mediterránea

Tipo de comida: Helados