La inaccesible vivienda de Palma

Tras los ocho años de gobierno municipal de izquierdas, ahora los palmesanos destinamos ya el 58% de nuestro sueldo a pagar el alquiler de nuestra casa. Es la cifra más alta de los últimos diez años. Y es que, según informaba la directora de Estudios de Fotocasa, el precio del alquiler se encuentra en su nivel máximo histórico, con los incrementos más exagerados de los últimos 17 años. Con estos datos estamos ya más de diez puntos por encima de la cifra de hace diez años, siendo obvio que la problemática del acceso al alquiler se agrava cada vez más.
Así, tras ocho años de políticas del llamado Pacte de Progrés, se constata que el esfuerzo salarial del ciudadano para pagar el alquiler está muy por encima de lo recomendado por Europa, que es un máximo del 30% del salario para pagar la vivienda. ¿Dónde quedan los alquileres sociales?
Esto viene provocado por dos causas: el aumento de los alquileres y la pérdida de poder adquisitivo, con una inflación que supera el 5,7% en el último año. Y es que, medidas como la limitación de actualización de la renta conforme al IPC se han desvelado completamente ineficaces.
Si en materia de alquiler la cosa pinta mal, peor está la compraventa de vivienda. El precio se acerca también a máximos históricos, liderando Baleares este ranking, incluso muchas veces por delante de Madrid. El precio medio se sitúa ya en 2.689 euros el metro cuadrado, pues es en Palma donde más se ha acusado este aumento, según datos de la sociedad de tasación TINSA.
En materia de viviendas de protección oficial, la política del Pacte de Armengol e Hila con las VPO solo puede ser tildada de burla. Se acaba la legislatura y podemos decir que no se ha hecho nada. Sirva de ejemplo que tras ocho años prometiendo 830 VPO en el antiguo cuartel de Son Busquets, finalmente solo han podido garantizar que la Entidad Pública de Suelo SEPES adquiera el terreno. Y en la Concejalía de Modelo de Ciudad durante ocho años no han tenido tiempo para redactar tan siquiera el planeamiento urbanístico de este espacio.
Para intentar solventar esta situación, el Gobierno central anuncia a bombo y platillo que va a impulsar 93.000 viviendas sociales o de alquiler asequible -de nueva construcción o a rehabilitar- y que se financiará todo con fondos europeos o serán cedidas por la SAREB (Sociedad de Gestión de Activos Procedentes de la Reestructuración Bancaria). Pero rascando un poco constatamos que se trata de un bluf. Al pésimo estado de las viviendas existentes se une su nefasta ubicación. Y lo peor: resulta que en Baleares solo hay 120 viviendas, una tomadura de pelo.
Para rematar todo este despropósito, el Gobierno de Sánchez está decidido a sacar adelante su ley de vivienda, con el apoyo feliz de Podemos, ERC y Bildu. Objetivo: defender a los okupas, como hemos sabido en estos días. Como pueden ver suena todo «genial», valga la ironía.
Pues bien, frente a todo este desaguisado sepan que hay alternativa. Desde el PP de Palma, liderados por Jaime Martínez Llabrés, proponemos un plan de choque para solucionar esta situación. Entre las principales medidas de nuestro decálogo, sirvan de ejemplo la aprobación de un Plan General de Ordenación Urbana creíble y que dé solución a estos problemas, el poner coto a las okupaciones de inmuebles, defendiendo al propietario y dando seguridad jurídica, potenciar el programa Palma Habitada o aumentar también la actividad del Patronato de la Vivienda, fomentando al tiempo la construcción de VPO. Todo eso y mucho más para recuperar Palma para quien la habita. Vamos por ello.