La democracia avanza en Siria masacre a masacre
En Siria ha empezado ya la fiesta, mientras los telediarios oficiales de todo Occidente nos venden la mercancía averiada de unos yihadistas inclusivos, democráticos y moderados, sobre todo muy moderados. Lo importante es que ha caído Assad, y ya todo va a ir como la seda.
A este lado del muro tenemos un problema de percepción muy grave, no de ahora, sino al menos desde 1789 (la Revolución Francesa, para los de la ESO), y es el movimiento reflejo mental de ir con «los rebeldes» de cualquier catadura, en cualquier lugar. Nos pone.
Hay que entenderlo, son siglos de sacralizar la barricada y la revuelta, y al final el continente se impone al contenido y la forma a la materia. Hasta la extrema derecha patria, puesta a montar un grupo juvenil, lo llama Revuelta, que no hay que descuidar el marketing ni desconocer los resortes psicológicos de la parroquia.
La izquierda, que tiene secuestrado el pensamiento colectivo desde los jacobinos, vive de eso, y aunque ahora pise moqueta y no se baje del coche oficial, tiene que posar de contracultura y resistencia, sobre todo resistencia. Y ahí tenemos a ministros con nostalgia de barricada que se apuntan a protestas contra ellos mismos.
Pero me estoy yendo del tema, que es la feliz Siria liberada, porque Al Jolani da muy bien en foto como el Fidel de Sierra Maestra en su uniforme verde oliva, ese mismo que Zelenski no se quita ni para dormir. Y sabe qué teclas tiene que pulsar para que nos traguemos lo intragable: inclusión, democracia, instituciones. Paz y amor.
Qué rabia que existan móviles y X e Internet, que uno entiende que Ursula y sus cuates a ambos lados del Atlántico quieran meter tijera a tanto espontáneo grabando lo que no debe, estropeando el bonito cuadro que nos pinta la oficialidad. Porque sucede, ay, que facciones armadas extremistas en toda Siria están llevando a cabo ejecuciones de civiles y soldados en medio del caos tras la caída del gobierno del depuesto presidente sirio Bashar al-Assad. Nada que no hayamos visto decenas de veces antes, pero esta vez iba a ser diferente.
Elijan vídeo. Hay uno circulando en redes en el que militantes armados de Hayat Tahrir al-Sham (HTS), la rama de Al-Qaeda que tomó el control de Damasco el sábado, llevando a cabo ejecuciones en el campo de hombres desarmados en la aldea de al-Rabia en el campo de Latakia. Un botón de muestra, para nada aislado. En los barrios de Nawaha y Al-Asadiya, militantes quemaron casas de civiles, robaron sus propiedades y ejecutaron al menos a tres personas, incluida una mujer. El lunes, militantes de ISIS mataron a 54 soldados del ejército sirio que huían de un ataque del grupo terrorista en la provincia central de Homs.
Los militantes del ISIS capturaron a «personal que huía del servicio militar en el desierto… durante el colapso del régimen» del presidente Bashar al-Assad y «ejecutaron a 54» de ellos en el área de Sukhna en el desierto de Homs. Según fuentes sirias, también asesinaron al jeque Tawfiq al-Bhouti, hijo del erudito musulmán sunita de renombre mundial, el jeque Muhammad Saeed Ramadan al-Bhouti, que fue asesinado junto con otras 40 personas en una mezquita en 2013 por miembros del Frente Nusra, ahora conocido como HTS.
Uno debería escamarse, aun sin ver vídeo alguno, al ver instancias tan impecablemente moderadas y democráticas como Hamás y los talibanes afganos siendo los primeros en felicitar a los inclusivos chicos de Al Jolani, que vienen a ampliar derechos en Siria. «Expresamos nuestra esperanza de que el proceso de transición de poder se lleve a cabo de una manera alineada con las aspiraciones del pueblo sirio, allanando el camino para el establecimiento de un gobierno islámico independiente y orientado al servicio», indicó un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores afgano, pidiendo que Siria pueda «avanzar libre de interferencias externas». Mientras, Hamás en Gaza enviaba un mensaje similar, elogiando al pueblo sirio por lograr sus «aspiraciones de libertad y justicia» después de que el ejército sirio colapsara y Assad huyera del país. En la primera declaración pública de Hamás sobre la crisis de Siria, el grupo afirmó: «Apoyamos firmemente al gran pueblo de Siria […] y respetamos la voluntad, la independencia y las opciones políticas del pueblo de Siria».
Pero tranquilos, que son moderados y aunque matan, matan poquito y con la bendición de la Unión Europea.
