¿Existen las leonas con melena?
La melena es algo propio de los leones machos, es muy raro que pueda verse en hembras
Uno de los detalles más característicos de los leones es su larga melena, algo que se da solo en los machos, y nunca en las hembras. Nunca hasta ahora, que se ha descubierto que sí existen las leonas con melena. Al menos existe una, quién sabe si más.
Las hembras suelen tener un pelaje corto, lo que hace que se puedan distinguir rápidamente de los machos con simplemente verlas. Pero recientemente se ha descubierto que, como en casi todo, en esto también hay una excepción que confirma la regla.
Bridget, la leona con melena
Este ejemplar femenino con melena es Bridget, una leona que tiene 18 años y vive en el zoo de Oklahoma City, en Estados Unidos. Allí ha dejado alucinados a todos los cuidadores ya que hace unos meses le empezó a crecer la melena, algo que suele suceder únicamente en los machos cuando llegan a la edad adulta.
No es la primera vez que se ven leonas con melena, de hecho, en 2014, se vieron cinco más en la Reserva Natural de Moremi, en Botsuana. Varios zoólogos estudiaron entonces el comportamiento de estas hembras durante algunas semanas para poder saber a qué se debía el crecimiento de su melena.
Esas investigaciones revelaron que las leonas con melena tenían algunas actitudes más propias de los machos, como por ejemplo rugir, marcar territorio e incluso montar a otras hembras. La causa principal creen que es el aumento de la producción de testosterona, una hormona que incide de manera muy directa al crecimiento de las melenas de los machos.
Este aumento de la testosterona está relacionada también con su reproducción, ya que aunque se hayan apareado no han visto a ninguna que se haya quedado embarazada. Viendo esto, han llegado a la conclusión de que las leonas con melena no son fértiles.
El caso de Bridget podría ser diferente, ya que aseguran que no ha mostrado todavía un comportamiento masculino, por lo que quizás si podrá tener la capacidad de reproducirse. Este hecho descarta la supuesta hipótesis de que su melena se debe a que produce más testosterona de lo habitual.
Los zoólogos que están dedicándose a estudiarla le han extraído sangre para compararla con la de su hermana, que tiene su misma edad pero no le ha surgido la melena.