Adiós a las pantallas en los coches: su sustituto ya está aquí y lo conocemos muy bien

Aumenta la tendencia de incluir botones físicos en los cuadros de mandos en lugar de pantallas.

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  • Juan Carlos Acero
  • Desde 2014 especializado en la redacción de contenidos y el marketing. Me encanta escribir sobre automoción y el mundo de la empresa. En mi carrera como redactor he escrito para multitud de medios especializados.

Aunque pueda parecer mentira, los mandos físicos están regresando a los automóviles. No se fueron nunca en algunas marcas, pero en otras al final han terminado por recular después de las críticas de los usuarios.

La aparición de los botones es algo en lo que tienen bastante que ver lo que opinan los usuarios. Las funcionalidades mandan y la gente lo que quiere son botones físicos en muchos casos, puesto que se pasan muchas horas delante de las pantallas y no solo la del coche.

Pantallas y botones tendrán que convivir

¿Botones físicos o pantallas?

Este tema de la vuelta a los mandos físicos ha sido objeto de reflexión por parte de Rachel Plotnick, profesora de tecnología de la información de la Universidad de Indiana y que fue autora de un análisis interesante sobre la convivencia entre pantallas y botones físicos. Hablamos de un tema complementario, pero no excluyente.

Más botones de verdad y menos pantallas

Los fabricantes tendrán que dar marcha atrás si desean sacar una nota buena en la Euro NCAP.  Lo que ocurre es que ahora todo ha pasado a ser una pantalla, el coche era una pantalla táctil y la gente se cansó de ello.

Los botones no siempre se tienen que mirar, también ofrecen más variedad de tacto y respuesta.

De la misma forma, como decimos antes, es posible que todo ello sea fatiga de pantalla. Se pasa todo el día y la noche en este tipo de dispositivos, desplazándose o pasando páginas y vídeos de manera constante, algo que al final acaba por cansarnos. El botón es una manera de des-tecnificar nuestra existencia cotidiana, hasta cierto punto.

Además de los móviles, tablets o que estemos frente al ordenador durante largas horas, otro tema importante, es que cuando se conduce, realmente no es seguro que el coche vaya a funcionar así. Un botón se va a tocar y evitará que no se mire a la carretera una pantalla o un mando háptico que se debe mirar para poder activarlo.

Lo mejor es un cuadro de mandos equilibrado

La alternativa más adecuada es que haya pantallas, pero también botones dependiendo la función. Una tendencia que lo que hace es confiar la que señaló Volkswagen o Hyundai.

La marca asiática ha señalado hace poco que nunca abandonará los mandos físicos, porque es lo que demandan los clientes. Cuando se hacen las pruebas con el grupo de control, lo que ocurrió es que se dieron cuenta de que la gente se molesta bastante cuando quieren controlar algo y no pueden hacerlo.

No es que haya que eliminar en su totalidad las pantallas de los automóviles, debe haber una convivencia y que se haga, de forma lógica, que la propia función lo determine.

En las operaciones que se suelen hacer mientras se conduce: mandos físicos

Los ajustes de la climatización, reglaje de luces o elegir modos de conducción, es algo que es más eficaz cuando los podemos activar mediante el tacto.

Esto tiene todo el sentido, lo que no lo tiene es navegar en un menú y que haya que clicar varias veces para activar el modo eléctrico en un vehículo híbrido enchufable.

En el caso de otras como las de navegación GPS, mantenerlo en la pantalla, en las que tiene más sentido y es bastante más orgánico. Todo ello sucede porque de esta clase de app nacieron en dispositivos con pantalla.

Hablamos de una tendencia que no la encontramos solo en las marcas del Grupo Hyundai. La japonesa Mazda siempre limitó la utilización de las pantallas en sus automóviles, aunque las incluyese. En su interior también hay muchos mandos y botones, algo que es de agradecer. En el caso de marcas como DS o Bugatti, se hace más por diferenciarse o diseño.

De todas formas, pese a que la conducción autónoma puede que cambie esta tendencia, no se debe fiar todo a la pantalla. El tiempo que se pase intentando activar una funcionalidad en el display no vamos a estar mirando a la vía. Hablamos de cientos de metros, en el caso de que vayamos a altas velocidades. La DGT nos prohíbe utilizarlas en marcha y nos va a multar por ese motivo.

Existen marcas como la norteamericana Tesla que van en dirección contraria, puesto que sus modelos cuentan con un número menor de mandos físicos. El avance y la vanguardia no es posible que vayan contra la propia seguridad vial, aunque lleven mucha tecnología preventiva en los coches. Los consumidores mandan y demandan botones.