El Canal pagó otros 5 millones «en metálico» a los españoles que vendieron Inassa a través de Panamá
La operación del Canal en Colombia, con la compra de Inassa y sus filiales y la constitución de Extensia, le costó finalmente más de 100 millones de euros. A los 83 millones de la primera fase de la operación habría que sumarle otros 26,5 por la recompra de acciones y dos ampliaciones de capital. Es más, el Canal de Isabel II pagó 5 millones de euros «en metálico» a los españoles que vendieron Inassa a través de Panamá.
Nueves meses después de que la filial del Canal, Extensia, adquiriera la colombiana Inassa por 83 millones de euros, a través de una sociedad ofsshore SAA, radicada en el paraíso fiscal de Panamá, la dirección de la compañía de aguas madrileña apostó por una ampliación de capital de 18 millones. El 7 de octubre de 2002, el Consejo de Administración, presidido por Arturo Canalda, aprobó el desembolso de 13.500.000 euros. El resto fue suscrito por Tecvasa.
El capital social de Extensia pasó a ser de 43,6 millones, del que el Canal conservaba el 75% y Tecvasa, el 25% restante. Al mismo tiempo, se optó por recomponer el accionariado de otras sociedades del grupo: AAA Servicios pasó a ser propiedad al 100% de Inassa, que adquirió las acciones que le faltaban a Triple A. Igualmente, Inassa compró a Tecvasa el 49% de Lassa, otra offshore panameña, que quedó extinguida.
Tras una dura disputa entre el Canal y Tecvasa por el control de Extensia, la empresa madrileña decidió adquirir todas las participaciones en el grupo en poder de sus socios españoles, los antiguos directivos de Agbar liderados por Francisco Olmos.
La valoración de las acciones fue realizada por JPMorgan: 11,76 millones de euros por el 25% de Tecvasa en Extensia, el 3% de Inassa, el 0,9% de Triple A y el 17% de Ocymsa. La operación se articuló de la siguiente manera con la Caja de Ahorros del Mediterráneo, que era socia de Tecvasa:
-5 millones en metálico por Tecvasa.
-2 millones por el resto de participaciones.
Así mismo, se aprobó una nueva ampliación de capital por importe de 6 millones para pagar la deuda financiera existente (3 millones) y reequilibrar el patrimonio de la sociedad (otros 3 millones).
Toda la operación fue aprobada por unanimidad por el Consejo de Gobierno de la CAM del 6 de octubre de 2005, tras pasar por la Hacienda madrileña y Patrimonio de la Comunidad.
En el auto del juez Velasco, por el que Ignacio González ingresó en prisión, el magistrado habla de una “supuesta malversación de fondos públicos empleados en la compra de Inassa en el año 2001”.
Velasco asegura que el Canal invirtió en Extensia unos 100 millones de euros, una sociedad cuyo valor societario sería muy inferior, rondando unos 30 millones.
El juez recuerda las palabras de Edmundo Rodríguez, ex presidente de Inassa, que “calificó esta operación como un robo de 25 millones”, según se recoge en el auto judicial.